"Las medidas de Rajoy son necesarias"

Carlos Aguirre cree que el gran debate pendiente en Euskadi es el de cerrar un modelo fiscal que garantice los ingresos presicos para sostener los servicios públicos. En ese contexto, el consejero de Economía y Hacienda califica como "necesarias" las medidas aprobadas el viernes por el Consejo de Ministros para abrir una discusión tributaria que el PNV rechaza desde Bizkaia y el PP desde Álava.

Pregunta. ¿Es prudente felicitar el año 2012 o es mejor que pase cuanto antes?

Respuesta. 2012 va a ser muy difícil porque hemos entrado en una senda de desaceleración que ahora está en su punto más bajo por influencia de los mercados exteriores. El segundo referente es el fiscal. Las previsiones de recaudación, aunque modestas, nos llevan a un nuevo escenario de ajuste con presupuestos a la baja y con un mensaje muy claro: el modelo tributario y fiscal no da los recursos suficientes para mantener los servicios públicos. El gran debate es el modelo fiscal y tributario que nos permita mantener el nivel de los servicios públicos a los que nos hemos acostumbrado

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"Todos nos encontramos al borde de la recesión" "El modelo fiscal no da los recursos para mantener los servicios públicos"

P. Rajoy ha comenzado a dar los primeros pasos concretos. ¿Qué le parece la primera oleada de recortes aprobada el viernes por el Consejo de Ministros?

R. Nos parecen unas medidas necesarias. Luego ya reflexionaremos cuáles son de aplicación en Euskadi y convenientes según nuestro sistema tributario, pero son necesarias para abrir el debate fiscal que precisamente el PP y el PNV han cerrado en Euskadi con una minirreforma.

P. ¿Qué impacto van a tener en Euskadi?

R. Estamos haciendo los cálculos, pero un impacto importante en los tres bloques que ha reformado. En los aspectos laborales, con la subida a 37,5 horas de la jornada laboral en el sector público, sobre todo en Justicia, Ertzaintza, Educación y Sanidad, y quizás menos en reducción de gastos. Pero en fiscalidad va a ser muy importante. De los casi 5.500 millones relacionados con la fiscalidad, a nosotros nos afectará bastante, el 85% por el ajuste del IRPF y en torno al 15% restante por la diferente tributación del ahorro.

P. ¿Son todas aplicables en el País Vasco?

R. Curiosamente, Rajoy ha lanzado unas medidas que nos pasan por la izquierda y por la derecha. Hace lo que PP y PNV han rechazado con un discurso como que "la vaca ya estaba totalmente ordeñada", o que con una reforma fiscal más profunda se iban a deslocalizar contribuyentes. A ver qué dicen ahora en la Diputación de Bizkaia o en el PP vasco.

P. La minirreforma fiscal ha provocado desarmonización. ¿No hubiera sido mejor dejar las cosas como estaban?

R. Se ha producido una pequeña desarmonización en Patrimonio, y algo en IRPF y en Transmisiones, en las EPSV, vivienda y base del ahorro. Pero el modelo planteado en Gipuzkoa se acerca más al que hay en España que al de las otras dos Haciendas vascas. Hay desarmonización respecto de Bizkaia y Álava, pero no respecto al resto de España, que en fondos de pensiones y vivienda tiene un modelo más progresista que el que tenemos aquí. Y ahora todavía va a haber más distancia tras las medidas anunciadas por Rajoy.

P. Reduciendo el fraude fiscal se podrían recuperar hasta 2,5 puntos sobre el PIB. ¿A qué atribuye que Bizkaia se niegue en redondo a hacer campañas conjuntas de inspección?

R. Lo atribuyo a dos cosas. Bizkaia intenta salvaguardar sus competencias en materia tributaria. Y, después, desde el punto de vista político, no dar ni un soplo de aire al lehendakari. Pero el sistema de armonización fiscal depende del Parlamento. Algo habrá que decir allá.

P. Pero sin capacidad de decisión en el Gobierno o en el Parlamento las políticas generales pueden acabar totalmente condicionadas por las Diputaciones.

R. Efectivamente, pueden llegar a ser más importantes las bonificaciones fiscales a I+D que la propia política de subvenciones del Gobierno en esa materia. O de mayor cuantía e incidencia las desgravaciones en vivienda que la propia política de vivienda del Gobierno. Todo eso hay que arreglarlo. Se están decidiendo políticas sectoriales desde las Diputaciones a través de las normas tributarias y eso hay que arreglarlo.

P. El Informe integrado de la Hacienda vasca concluye que la actividad de la Inspección de Bizkaia es la más baja de las tres instituciones forales.

R. Pues sí, pero ellos dicen que no. Dicen que es suficiente y razonable y que ellos son los competentes y que no van a entrar en otras consideraciones. Pero sí parece que hay bastante más dinamismo en las otras dos Haciendas.

P. Al caer la recaudación fiscal sigue cayendo la presión tributaria.

R. Con datos de 2011 no llegaremos al 32% de presión fiscal sobre PIB y, si nos quedamos solo con los tributos concertados, quitando las cotizaciones sociales, este año el cierre nos va a llevar al 17,3% del PIB. Es mucho más baja que en otros países. El 32% hay que compararlo con el 38% o el 39% de media en la Eurozona, o el 36,5% de Alemania, el 41,5% de Francia,... Estamos a años luz.

P. Mientras tanto, ¿quién paga esta factura?

R. La paga el ciudadano vasco, por un lado, y el déficit, por otro. Y como en déficit estamos muy ajustados, pues tenemos que ajustar por la parte del gasto, y eso conceptualmente no nos gusta.

P. El Gobierno central considera que España entrará en recesión durante este año. ¿Entrará también Euskadi entonces?

R. El escenario lo marcan las economías del entorno más cercano. Muchos crecimientos venían determinados por nuestra capacidad para vender fuera, y eso ha caído.

P. Es decir, que estamos en el borde de la recesión.

R. Todos estamos ahí. El tiempo dirá si estamos unas décimas por encima o unas décimas por debajo.

P. En materia de empleo se ha roto la mesa de negociación sobre los funcionarios. ¿Qué acuerdos van a llevar al Consejo de Gobierno del día 10?

R. Estamos esperando a ver cómo adaptamos los acuerdos del Gobierno de España, porque ya nos han condicionado. Lo que queremos es contener una cuestión como los gastos laborales, que es la que más incide en nuestras cuentas. Intentamos que no sea tan importante el crecimiento de la nómina para que no estrangule el resto de las políticas. Ahora que ya tenemos las medidas de Madrid hay que estudiar si son de aplicación y cómo.

P. ¿Teme que a la crisis económica se sume la conflictividad social por los recortes?

R. Creo que, en general, un puesto de trabajo de un empleado público tiene cosas que no tienen los demás. La extraordinaria estabilidad que no tienen los demás puestos, condiciones extrasalariales, conciliación, jornadas que tampoco se ven en el mercado y cierta capacidad para desarrollarse, movilidad profesional... Tendremos que incidir en todos ellos para que la conflictividad sea menor. Creo que el empleado publico es consciente de ello y que lo más importante es salvaguardar eso.

P. ¿El Gobierno tiene capacidad para desinvertir más?

R. Sí, pero no como para arreglar el déficit. Tenemos patrimonio, y podría vender cosas que luego deberíamos tener que alquilar. Si hubiera que hacerlo se haría, pero no creo que vender edificios para tener que alquilarlos después sea conveniente en estos momentos.

P. ¿Es sostenible la existencia de sociedades públicas que generan mucho déficit de explotación y arrastran deuda?

R. Depende de qué sociedades públicas...

P. El BEC, por ejemplo, con casi 400 millones de deuda.

R. El problema no es tanto de los cuatro, cinco o seis millones que pierde al año. El problema del BEC es que cuando llegamos aquí vimos que no se había amortizado un euro de los créditos que se habían solicitado para hacer la obra, al Banco Europeo de Inversiones y a un pool de bancos. Esa vía es infinitamente superior al déficit de explotación. Es su gran problema.

P. ¿Existen más lastres como el del BEC?

R. Hay puntos de endeudamiento en otras sociedades, como Bilbao Ría 2000 o el Consorcio de Transportes, pero no son especialmente importantes y en estos casos no están cuestionados.