Educación traslada quejas a los tribunales de oposiciones

Tres sindicatos han denunciado presuntas irregularidades en las oposiciones a maestro de Madrid celebradas el pasado noviembre, a las que se presentaron más de 20.000 personas para 489 plazas. Entre ellas, el permiso para usar calculadora solo en algunos tribunales, frente a la orden de no usarla. Disponer de ella -denuncian CC OO, UGT y ANPE- supone un ahorro de tiempo para la primera prueba. UGT contabilizó al menos ocho tribunales en los que se autorizó el uso de la calculadora en las pruebas de Infantil, Inglés y Pedagogía Terapéutica. A la Consejería de Educación y Empleo le consta "únicamente" este hecho, según un portavoz, en "algunos tribunales de Educación Infantil" a los que ha trasladado las quejas y que son los que deberán decidir qué hacer con la prueba, según la Consejería.

Otra de las presuntas irregularidades denunciadas por los sindicatos es que el personal de una academia de oposiciones repartió desde las 12.00 del día del examen "fotocopias de la prueba corregida", según Comisiones, que denuncia "una posible filtración". También se quejan de que algunos tribunales dictaron o escribieron en la pizarra las pruebas en lugar de entregarlas en papel, lo que también afectó al tiempo disponible para los aspirantes. La mayoría de las plazas (290 de 489 vacantes, el 60%) estaban reservadas a Inglés. Otras 74 son para Educación Infantil y 25 para otras cinco especialidades: Primaria, Audición y Lenguaje, Pedagogía Terapéutica, Música y Educación Física. Opositores de inglés se quejaron de que el primer examen no se hizo en inglés "a pesar de que en la convocatoria se especificaba" que para esa especialidad "todas las pruebas se realizarían en esta lengua".