_
_
_
_
Columna
Artículos estrictamente de opinión que responden al estilo propio del autor. Estos textos de opinión han de basarse en datos verificados y ser respetuosos con las personas aunque se critiquen sus actos. Todas las columnas de opinión de personas ajenas a la Redacción de EL PAÍS llevarán, tras la última línea, un pie de autor —por conocido que éste sea— donde se indique el cargo, título, militancia política (en su caso) u ocupación principal, o la que esté o estuvo relacionada con el tema abordado

'El resplandor'

Fue ver ayer en este periódico la foto con las notas que don Mariano estuvo pergeñando durante el debate (sobre el supuesto estado de esta pobre nación) y entrarme, de repente, un terror hitchcockiano respecto al porvenir que ni Con la muerte en los talones puede igualar.

No es el contenido solo. Es también la forma. Ese enredo de signos y señales. De igual manera que me asustan los metódicos, la gente que escribe con letra muy menuda, y no deja márgenes, y convierte las hojas de papel en mazacotes de letras a los que difícilmente puede encontrarse la salida, me desazonan las notitas encerradas en círculos, las iniciales, los bailes de palabras, los trazos en rojo, los circulitos, que parecen sentencias de vida, danzando en mitad de un paisaje atrabiliario. El contraste entre la barbuda señoría y su producto escrito me pone las vértebras de punta.

Todo ello unido a la fúnebre actitud, la frialdad, la determinación: son nuestro futuro. ¿En forma de panteón, con su musguito y su liquen? Busco en mi fondo de armario peinetas para rasgarme las vestiduras, pero ahora recuerdo que las enterré en el tacho de la basura cuando leí por primera vez La regenta.

Pese a todo, quiero creer que lo harán bien. Que el caballero de la barba recortada y la partitura dadá tiene un programa. Van a ahorrar, señores, sí, y van a generar inversión y empleo. Empleo, empleo, empleo. Ojalá, ojalá, ojalá. Peineta, peineta, peineta. Conjuro, conjuro, conjuro. Y rogativas al Papa, que seguro que Su Santidad echará una garra cuando venga a bendecir a la nueva España.

Pensándolo, lo de las notas me recuerda aquel momento de El resplandor en que la esposa de Jack Nicholson descubre que, en vez de la novela, él ha estado tecleando una sola palabra. Ahora bien: ¿cuál?

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_