Barenboim 'rompe' el embargo
El director reúne a un 'all stars' de intérpretes para un recital único en Gaza
El director de orquesta argentino-israelí (con pasaporte español y palestino) Daniel Barenboim desafió ayer con su música, una vez más, el ciclo de pesimismo y malas noticias procedentes de Oriente Próximo. En medio de las convulsiones que azotan al mundo árabe, ha llevado su sonido a la franja de Gaza, el territorio palestino en el que un millón y medio de personas sobrevive al embargo israelí que dura más de tres años.
Músicos de las mejores orquestas europeas como la Filarmónica de Berlín, la de Viena, la Orquesta de París, la Staatskapelle de Berlín y La Scala de Milán llegaron a Gaza desde Egipto a través de la frontera de Rafah envueltos en grandes medidas de seguridad. La iniciativa contó con la coordinación y el apoyo de Naciones Unidas, ya que se trata de la primera vez que una agrupación musical de esta envergadura toca en la asediada franja. La formación circunstancial, bautizada como Orquesta para Gaza, eligió la Sinfonía número 40 de Mozart y el Eine Kleine Nachtmusik del genio de Salzburgo para la ocasión.
"Nuestro conflicto es entre dos pueblos que están convencidos de tener el derecho de vivir en el mismo pedacito de tierra, nuestros destinos están unidos. (...) No se puede esperar de nadie que viva bajo una ocupación", lanzó Barenboim, según Efe, a una audiencia de 700 personas que le ovacionó. El concierto, que finalmente se celebró en el centro cultural Al Mathaf, estuvo a punto de suspenderse la noche del lunes por la reticencia de algunos sectores de Hamás. Tras algunas negociaciones, se logró el acuerdo. "Este es un proyecto que tenía Barenboim y no se podía hacer por la situación política, pero con la caída de Mubarak las fronteras de Egipto y Palestina se han abierto", explicó ayer, desde Gaza, Alfonso Aijón, promotor en España de Barenboim. "Ha estado muy concurrido, gente de los conservatorios y de las Naciones Unidas y bastantes niños", añadió.
Son pocos -periodistas, diplomáticos y trabajadores humanitarios- los que obtienen permiso oficial de Israel para entrar en la franja. Barenboim logró ayer superar la montaña de obstáculos administrativos y hacer que la música de una orquesta internacional se escuchara en Gaza.
Babelia
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