"El 'caso Margüello' sigue tan abierto como antes"

El consejero de Sanidad, Rafael Bengoa, defiende la aplicación de su plan de crónicos más allá de esta legislatura y, aunque este ha sido planteado como un paso para garantizar la sostenibilidad del sistema, Bengoa sigue sin cerrar del todo la puerta al copago.

Pregunta. ¿Son suficientes cuatro años de legislatura para emprender su plan de crónicos?

Respuesta. Sí, es suficiente, pero el sistema necesitará otros ocho o diez años.

P. ¿Teme que si hay un cambio de Gobierno en 2013 su reforma se paralice?

R. No, porque el cambio no depende de mí. Al principio sí, pero ahora ya hay médicos trabajando en ello. Esté quien esté , este cambio no será modificable porque los retos serán los mismos; el envejecimiento y las enfermedades crónicas. Es una realidad tan brutal que un gobierno no puede decir "no, voy a hacer otra cosa".

"Hay que centralizar lo sociosanitario en el Gobierno vasco"

"Cuando veamos los frutos de las reformas, veremos si evitamos el copago"

"Osakidetza atiende mejor prácticamente en todos los aspectos"

P. ¿Qué otros cambios prevé impulsar?

R. Hay que centralizar lo sociosanitario en el Gobierno. Hay que hacerlo porque donde uno va a encontrar más dinero perdido, donde los ciudadanos siguen sintiendo mucha fragmentación, es en ese espacio. Eso no se va a arreglar con el arreglo institucional de los años 70.

P. ¿Restarán competencias a ayuntamientos y diputaciones?

R. Los ayuntamientos seguirán prestando muchos servicios sociosanitarios, pero con el Gobierno. Donde veo menos margen de actuación es en las diputaciones. Hay que empezar a atacarlo ya. Este Gobierno tiene que hacer el cambio, esté quien esté en las diputaciones y en el gobierno. Esta legislatura deberíamos tener un informe que ahonde en este aspecto, elaborado por técnicos, antes de meterlo en las representaciones institucionales donde probablemente habrá mucha bronca.

P. ¿Es arcaico el reparto de competencias actual?

R. Es un chasis viejo. Es evidente que tiene que haber una unificación de las políticas sociosanitarias y un marco único para atender a las personas.

P. ¿Cree que los usuarios de Osakidetza están tan preocupados por los crónicos como usted?

R. Es posible que no haya tanta concienciación de lo que requiere la cronicidad. Lo que queremos es controlarla bien para que no entre en fase aguda. Pero no estamos contraponiendo a crónicos y agudos.

P. ¿No preocupan más las listas de espera y la reducción del número de camas en los hospitales, en niveles de 2003-2004?

R. No, porque todos los indicadores que tenemos, menos en dermatología y oftalmología, los resultados son mejores que antes en listas de espera. La oposición ha creado una falsa impresión de que la espera va peor, pero va mejor que antes. Algunos dicen cosas anecdóticas que no se corroboran con datos. Marzo es otro mes en el que vamos muy bien.

P. Se muestra muy optimista sobre Osakidetza. ¿Atiende mejor que antes?

R. Sí, prácticamente en todo. Los indicadores objetivos me construyen un panorama bien positivo en un contexto de crecimiento cero presupuestario. En algunas cosas tenemos que mejorar, como las listas de espera de dermatología. Si se demuestra un empeoramiento con datos, soy el primero en cambiar lo que sea necesario.

P. Sin embargo, si los trabajadores están descontentos, la calidad de la atención se resiente.

R. Son los mejores retribuidos del Estado, somos los únicos que estamos haciendo una Oferta Pública de Empleo, seguimos con la carrera profesional encima de la mesa... Y la huelga de PAC está en vías de resolución.

P. El Parlamento rechaza el copago. ¿Lo habrá esta legislatura?

R. No lo sé, pero es algo a lo que no cerraría las puertas al 100%. No hay que introducir el copago antes de hacer reformas porque, si no, el dinero va a entrar en el sistema y va a desaparecer. Cuando veamos los frutos de estas reformas, evaluaremos si podemos evitar acudir al copago.

P. Entonces no garantiza que con su plan se evite el copago...

R. No hay que cerrar las puertas a nada. Incluso con las eficiencias de las reformas, hay mucho dinero que se pierde. Hay mucho ahorro posible, pero el impacto demográfico, el costo de los medicamentos y el costo de las tecnologías es grande.

P. ¿Por qué se ha convertido usted en la diana del PNV?

R. No gustó que desde una familia nacionalista como la mía surgiera alguien independiente que aprendió de su padre no solo el nacionalismo, sino también la pluralidad. En Euskadi la gente sigue necesitando estar en zona de confort psicológico; o son de estos o son de los otros. Además, el PNV se está poniendo nervioso por el éxito del programa de crónicos; ellos no lo inventaron, pero me gustaría que se sumaran.

P. El PNV ha denunciado contratos de Osatek con empresas relacionadas a sus altos cargos...

R. En Osatek no hay nada, yo duermo bien tranquilo.

P. ¿Es posible evitar vínculos entre cargos públicos y empresas privadas?

R. Sí, se pueden evitar, pero yo nunca iría hacia un modelo en el que el sector público está gestionado solo por burócratas. El vaivén ha ocurrido siempre y es muy sano porque hay transferencia de conocimiento. Si en ese vaivén hay una ilegalidad, se va a por ella.

P. ¿Pondrán en marcha el sistema antifraude que prevé su código de buen gobierno?

R. Las propuestas se irán probando progresivamente. El asunto Margüello salió de la Dirección de Sanidad en Vizcaya por alguien que denunció ante un medio, cuando debería haber tenido la posibilidad de acudir a un proceso interno de denuncia. Esta vía es una de las iniciativas que propone el documento.

P. ¿Es Inclán el responsable del caso Margüello?

R. El Parlamento y los jueces son los que tienen que pronunciarse ahora.

P. Ya lo ha hecho un juez, que ha sobreseído el caso por prevaricación.

R. El sobreseimiento será recurrido. El juez reconoce que hay irregularidades, pero no prevaricación.

P. ¿Debilita este auto las denuncias que han venido realizando sobre el caso?

R. La causa sigue abierta, hay otra más y el Tribunal de Cuentas del Estado ve indicios de estos delitos. No estamos ante un caso cerrado. El caso sigue tan abierto como antes de este sobreseimiento provisional.