_
_
_
_

La misteriosa muerte de Fusseni

La autopsia salva a tres temporeros acusados de homicidio tras apalear a un hombre - Arrestado un tractorista por el atropello mortal del inmigrante

Cherif, Buondia y Wandifa no quieren salir en las fotos. Buscan olvidar cuanto antes la pesadilla vivida durante más de 60 horas de detención. Aún están asustados y los problemas para expresarse en español suponen una barrera a la hora de explicar lo ocurrido el sábado por la noche. Ese día, según la versión de los tres senegaleses, el maliense Fusseni Dioni, de 32 años, irrumpió violentamente en su habitáculo del albergue de temporeros tras romper el cristal de la puerta.

Poco después, Fusseni apareció muerto en una calle de Torregrossa (Pla d'Urgell), con evidentes señales de violencia en el cuerpo. Un vecino de la localidad descubrió sobre las 20.50 horas del sábado el cadáver en la calle de Zulueta, a unos 50 metros del albergue de temporeros.

El conductor del vehículo quedó en libertad tras declarar ante la policía

Los Mossos d'Esquadra les detuvieron, acusados de la muerte de Fusseni. Pasaron casi tres días en la cárcel, pero el lunes la autopsia les salvó: las heridas que presentaba la víctima, de 32 años, eran más propias de un atropellamiento que de una pelea.

Las pesquisas entonces se dirigieron hacia Ramon C., la persona que conducía el tractor que, según algunos testigos, pasó por la calle instantes antes de que se encontrara el cuerpo sin vida de Fusseni. El tractorista, de 47 años, quedó en libertad después de declarar que no se percató de la presencia de ninguna persona en la vía y que no era consciente de haber atropellado a nadie.

Los Mossos precintaron en un primer momento el vehículo agrícola para buscar pruebas que pudieran inculpar a Ramon en un accidente involuntario o en un delito por omisión del deber de socorro. No ha trascendido nada sobre el resultado de las pesquisas. En el lugar del supuesto atropello, a unos 20 metros de la puerta del garaje donde se guarda el vehículo agrícola, todavía quedan restos visibles de sangre, lo mismo que en el patio existente delante del alojamiento de los temporeros.

Qué mató a Fusseni no está todavía claro. "No teníamos ninguna relación con él y ese día nos limitamos a echarlo a la calle. Ni le pegamos ni le matamos", explica Wandifa. Los tres senegaleses llegaron al pueblo hace dos años en busca de un trabajo en el campo y se quedaron. De los tres, Cherif es el único que trabaja en la cooperativa del pueblo. Nadie tiene queja de ellos y entre los vecinos están considerados como "pacíficos y buenas personas".

Los vecinos de Torregrossa son los primeros en mostrarse desconcertados por lo ocurrido. "No puedo hablar de lo que no sé y tampoco sería elegante que me sumara a las especulaciones que se están haciendo", señala Montse, responsable del economato de la cooperativa local Les Planes, situado junto al alojamiento de temporeros donde la víctima se peleó supuestamente con los tres senegaleses.

Nadie vio ni oyó nada ese día, pero los Mossos d'Esquadra detuvieron en un primer momento a los hermanos Cherif y Buondia Cissé, y a Wandifa, sobrino de ambos, como presuntos responsables de la muerte de Fusseni. Debido al giro inesperado del caso, el juez puso en libertad con cargos por homicidio imprudente a los tres inmigrantes, aunque podrían quedar exculpados si se demuestra que Fusseni no murió a causa de los golpes.

Las investigaciones continúan y el propietario del tractor está abatido en casa y no quiere hablar del asunto. Es su madre la que defiende su inocencia afirmando que la víctima habría quedado "hecha papilla y sin un hueso entero" si, como sostiene la policía, hubiera sido atropellada por el tractor de su hijo, que pesa más de 15 toneladas. "Es una infamia todo lo que se ha dicho de él. Pido que investiguen bien lo que pasó porque el tractor no llegó a tocar al muerto", añade.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_