Madrazo evita respaldar a su delegado en la Cámara urbana

El exconsejero de Vivienda y Asuntos Sociales y ex coordinador general de Ezker Batua (EB), Javier Madrazo, evitó ayer realizar defensa alguna de su delegado territorial en Vizcaya hasta 2009, José María Gonzalo, en cuyas manos puso la liquidación de la Cámara de la Propiedad Urbana de esa provincia en 2006. Madrazo puso así distancia entre su persona y las posibles consecuencias de las acciones que el actual Gobierno ha enviado a la fiscalía, en un gesto que parece revelar cierta prevención y escasa confianza en quien fue uno de sus altos cargos.

Gonzalo se halla supuestamente implicado en la desaparición de casi medio millón de euros de la cuenta de esa entidad en BBK, una actuación en la que el Gobierno ve indicios de malversación y que remitió el martes pasado a la fiscalía.

Los dos supuestos implicados guardan silencio por consejo de sus abogados

Madrazo sí salió ayer, por contra, al paso de la entrada ena la polémica de los antiguos gestores de la Cámara vizcaína. Estos dan signos de que intentan aprovechar este escándalo para cobrar impulso y resucitar su contencioso con el pasado Ejecutivo por la atribución de sus bienes que hizo. Esta tarea no fue realizada por el departamento de Madrazo, sino por el de Hacienda, entonces en manos de la peneuvista Idoia Zenarruzabeitia.

A través de un artículo en su blog (javiermadrazo.wordpress.com), el exconsejero ofreció todo tipo de explicaciones para rebatir a los anteriores gestores, que tienen presentado un recurso por esta causa en el Tribunal Supremo, pendiente de resolución, contra la sentencia del Superior que desbarató el intento de hacerse con bienes que los jueces dieron por bien atribuidos al Gobierno. El exconsejero aventuró que el Supremo respaldará el fallo del tribunal vasco.

Su tono es muy distinto con respecto del caso que afecta a Gonzalo. Madrazo marca distancias y no da ninguna explicación de las actuaciones de su departamento sobre la Cámara de la Propiedad de Vizcaya. Y mucho menos hace reivindicación alguna de la labor desempeñada en ella. En la misma línea, elude la más mínima expresión de respaldo a quien colocó al frente de la Cámara y se limita a constatar que el caso ya está siendo investigado.

Madrazo da la impresión de encontrarse más cómodo en la respuesta a unos gestores con los que ya debatió y pleiteó el Gobierno antes y después de la liquidación de las Cámaras que en la explicación de lo acontecido cuando estas entidades urbanas estuvieron bajo responsabilidad de su departamento. De hecho, el exconsejero ha preferido mantenerse en silencio durante la semana que ha mediado entre el conocimiento público de los hechos, tras el Consejo de Gobierno del martes pasado, y ayer.

En la reaparición ahora de las Cámaras, Madrazo ve una intención evidente: "Entiendo que hay un interés claro por desprestigiar la actuación del anterior Gobierno vasco, en el que cabe todo, incluso una denuncia desestimada en su momento, que ahora se reabre", en referencia al fallo del Superior.

En contraste con la prolija respuesta que da en esa cuestión ya judicializada, sobre la nueva, la que realmente pone bajo sospecha la actuación de su departamento, se limita a señalar que "ya está siendo investigada", sin mencionar siquiera a Gonzalo. Los dos presuntos implicados han puesto el caso en manos de sendos abogados y guardan silencio por consejo de estos.