El gas 'hincha' la factura
Los usuarios que pasan las inspecciones obligatorias denuncian que el coste del servicio se ha duplicado en cinco años
Antonio V. recibió a principios de febrero una factura de Gas Natural por la inspección de la instalación de su hogar que creyó que estaba equivocada. Le cobraban 47,48 euros, sin IVA, casi el doble de los 25,64 euros que pagó cinco años antes, en 2006. Teniendo en cuenta el IPC, el aumento de la tarifa supera el 60%. Lluís Carciani ni siquiera recibió notificación alguna antes de la revisión. "El operario se presentó sin avisar", recuerda. "Solo estuvo cinco minutos, el tiempo que tardó en entrar, ir a la cocina y comprobar con un aparato si había fugas". Detalla, además, que "ni reinició el calefactor ni revisó los fogones". Aun así, le exigieron 41,02 euros más IVA. Molesto con la factura, la comentó con un vecino, que le informó de que la suya era de "42 euros con algo".
Los clientes se topan ahora con la subida de precios aprobada en 2007
Carciani se siente "pataleado", y más aún cuando una de las operadoras telefónicas de Gas Natural le contestó que tenía "todo el derecho a estar enfadado" pero que "es lo que hay". Los usuarios también denuncian que las llamadas para solventar las dudas o para hacer constar sus quejas son a un teléfono 902, que supone un gasto añadido para sus bolsillos. "Pagar para reclamar por un servicio que no se corresponde con lo que lleva a cabo el operario es el colmo", añade Carciani.
Cuando ambos afectados llamaron a la compañía para pedir explicaciones, Gas Natural se limitó a informarles de un aumento de las tarifas, la misma respuesta que obtuvo Antonio V. En marzo de 2007, dice la compañía, se tipificaron los nuevos precios. Hasta la fecha, se hacían inspecciones y revisiones. Las primeras, las formalizaba la compañía distribuidora y era gratuita. En cambio, las revisiones las abonaba el consumidor, que podía acudir a cualquier subcontrata para ejecutar el servicio. A partir de ese año cambió el sistema: la inspección es solo una, la hace la empresa suministradora y como se especificó en su día en el Diari Oficial de la Generalitat, "corre a cargo del cliente".
La finalidad del cambio fue "delimitar responsabilidades", según el Departamento de Empresa y Ocupación. Para calcular el precio, el Comité de Distribuidores de la Asociación Española de Gas estimó en cada comunidad autónoma los costes medios según el tiempo que se tarda en realizar la inspección, desplazamientos y la densidad de población.
Antonio y Lluís se han topado ahora de bruces con el aumento del sistema de tarifas aprobado en 2007, ya que las inspecciones hay que pasarlas cada cinco años. Como ellos, son muchos los que han decidido quejarse ante lo que consideran un abuso.
En Cataluña, se pagan dos conceptos: uno al consumidor, y que asciende a 39,68 euros más IVA, y otro sobre las instalaciones comunitarias, que es de 46,85 a repartir entre todos abonados de la finca. No obstante, personas de un mismo bloque de pisos, como le ocurrió a Lluís Carciani y su vecino, aseguran haber recibido facturas distintas por la misma inspección. Desconcertados, evidencian la "nula información" recibida y reclaman que se les desglose las actividades practicadas.
Los afectados consideran "indignante" que el operario no les avisara de que les iba a cobrar el servicio hasta haber terminado la inspección. Consideran que es "una estafa". Pese al descontento, los damnificados creen que ya "no hay nada que hacer", y agradecen tener un trabajo que les permita pagar las facturas, porque no quieren imaginarse "cómo les debe sentar estas cuantiosas sumas a los que están en el paro".
Para Antonio V. el aumento súbito de la tarifa no fue la única sorpresa. Tras recibir el aviso de que iba a recibir la visita de un operario, llamó para informarse de la inspección. Le dijeron que esta iba a costarle unos 10 euros menos de lo que finalmente tuvo que pagar. "La chica se equivocó y encima me dio la tarifa de Madrid, que resulta que es más barata", se queja. Al pedir explicaciones, Gas Natural simplemente le contestó: "Hemos subido los precios".
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.