La dirección del PSC planea relevar a Hereu para 'salvar' Barcelona

Que el actual alcalde de Barcelona, Jordi Hereu, no es santo de la devoción del aparato del Partit dels Socialistes de Catalunya (PSC) era conocido. Y lo confirmaban los silencios de sus mandos cuando se les preguntaba por su apuesta para intentar no perder Barcelona. Comenzando por el primer secretario y ex presidente de la Generalitat, José Montilla. Pero ayer la cuestión estalló durante la reunión de la comisión ejecutiva delante del propio alcalde: por lo menos dos voces, las de los ex consejeros Montserrat Tura y Ernest Maragall, manifestaron sus reparos a que Hereu sea cabeza de cartel y afirmaron que la capital catalana necesita "un revulsivo" que marque el proceso de recuperación del PSC. Montilla también subrayó la importacia de la capital catalana. Minutos después, Hereu abandonaba la reunión. Tenía que asistir a una entrega de premios.

El aparato del PSC planea salidas al regidor, como nombrarle senador

La candidatura por Barcelona, donde el PSC gobierna desde el restablecimiento de la democracia, lleva meses enfrentando a la Federación Socialista de Barcelona con la dirección nacional del partido. Ayer mismo la federación celebró también la reunión de su ejecutiva y lanzó al aparato el reto de que presente un candidato alternativo y se celebren primarias.

En cualquier caso, el aparato tiene otros planes para el actual alcalde. Entre ellos, que se vaya a Madrid de senador, lo que obligaría a acabar el mandato con un alcalde designado para apenas cuatro meses. Y dentro de esos planes, los nombres de los posibles candidatos para Barcelona vuelven a girar en torno a los que sonaban hace unos meses: descartado Ferran Mascarell -fichado por Artur Mas como consejero de Cultura-, quedan Montserrat Tura y David Vegara, ex secretario de Estado de Economía, y el ex consejero de Economía Antoni Castells.

Pase lo que pase en Barcelona, el calendario de preparación de las municipales arrancará este sábado: en las próximas dos o tres semanas se han de presentar las candidaturas y durante la primera quincena de febrero las agrupaciones locales deben elegir a sus candidatos si solo hay uno o celebrar primarias si se presenta más de uno. El partido se marca la segunda quincena de febrero para que las agrupaciones ratifiquen a sus candidatos, que serán aprobados definitivamente en un consejo nacional en marzo. La ejecutiva también encargó a Celestino Corbacho y Joan Rangel que trabajen para lograr la máxima implantación territorial del partido.

Ante la inacción de la cúpula del partido, empezando por su máximo responsable, José Montilla, la federación de Barcelona ya había decidido poner toda la carne en el asador (véase EL PAÍS del sábado pasado) y dar el pistoletazo de salida a la larga campaña que se avecina con un acto el próximo sábado. Ayer, Carles Martí, secretario de la federación de Barcelona, insistía que su candidato era Jordi Hereu, "pero facilitaremos el camino a posibles aspirantes a primarias", añadió. "Lo que no puede ser es que se pretenda imponer a otro candidato con componendas. Si hay algún interesado más, que dé un paso al frente y que el proceso se dirima en unas primarias", explicaba otro responsable.