MERIENDA CON... CHERIE BLAIR
"¿El velo? Crecí con monjas tapadas hasta el cuello"
CARMEN PÉREZ-LANZAC
Tras 11 horas de vuelo con sus tres horas de retraso, Cherie Blair aterriza en Madrid. Una hora después, perfectamente peinada y maquillada, sostiene un té moruno. "No creo que sea light", dice mirando un pastelito de miel y frutos secos. "Dios mío, siento todo el azúcar en la lengua", ríe tras catarlo. Acto seguido toma un sorbo de té buscando quizá compensar tanto dulce.