Intervenidas 33 bobinas de cobre a un chatarrero

A Blas Moreno, de 49 años, al final le ha caído la espada de Damocles. Los Mossos d'Esquadra le acusan de un delito de receptación de cobre, según informaron ayer. Esto es, de comprar material a sabiendas de que es robado. Los agentes encontraron 20 sacas grandes y 33 bobinas de cable por estrenar en su chatarrería de Siurana (Alt Empordà). Otras cuatro personas han sido también acusadas de vender cobre sustraído.

"No son bobinas, son 33 rollos pequeños de 12 kilos", esgrimió ayer Moreno en su defensa. Asegura que adquirió el cobre a un trabajador de Telefónica que justificó que era defectuoso. "Además está todo documentado", añadió. Las bobinas siguen en su almacén.Desde el 26 de agosto, los Mossos d'Esquadra se han convertido en la sombra de Blas Moreno. "Vienen varias veces cada semana a inspeccionar el material", explicó el acusado. La clave de los robos de cobre está en los compradores. Si nadie adquiriese el material (que se paga entre 1.300 y 3.200 euros la tonelada), no habría ladrones. Moreno sostiene que el cobre que hay en su chatarrería está "documentado". Eso implica que ha tomado el nombre, el DNI y el teléfono del vendedor. Con esos datos, los Mossos han investigado el origen del cobre y acusan a cuatro personas más de la supuesta venta de material robado.

Los Mossos d'Esquadra detuvieron el pasado lunes en la comarca del Maresme a cinco personas acusadas de robar cobre en una empresa de reciclaje de Sils (Selva). Los cacos aprovecharon la Diada de Cataluña para entrar en la nave y hacerse con tres toneladas de cobre y 1,5 de material de grifería.

Los Mossos pararon primero a un vehículo en Pineda de Mar. Al siguiente le dieron el alto en Tordera y detuvieron el último en Malgrat de Mar. Otras cuatro personas han sido detenidas también por intentar robar en una empresa de Fornells de la Selva (Gironès) dedicada a la venta de material pesado (aluminio, cobre, hierro...).

El AVE Barcelona-Madrid también ha sido saqueado. A las 5.15 de ayer fueron sustraídos 20 metros de cable en la zona de Vallecas, según explicó un portavoz del Adif. El robo afectó a 11 trenes y provocó retrasos de hasta 15 minutos en ambas direcciones, informa Pilar Álvarez.