El sector fotovoltaico acusa a Industria de ahogar su futuro

El recorte de primas a la energía solar fotovoltaica que ha decidido Industria, del 45% para los huertos solares y de entre el 25% y el 5% para las instalaciones fotovoltaicas en tejados, puede ser el fin de esta actividad. Así lo afirman las principales asociaciones de un sector muy atomizado, que ha conocido un desarrollo espectacular en los últimos años y que en 2009 recibió el 43% de las primas a las energías renovables, que se elevaron a 6.214 millones.

Tras más de cuatro meses de negociación con el departamento que dirige Miguel Sebastián, culminada en el recorte de subvenciones anunciado el fin de semana, las empresas viven en su actividad "una moratoria de facto" desde el año 2008, según señala un representante de la asociación APPA.

El PP asegura que el pacto energético se retrasa por la falta de propuestas

Aparentemente, añade otra asociación -AEF-, lo único positivo de las medidas que Industria ha recogido en el proyecto de real decreto enviado a la CNE es que no se centra en medidas retroactivas. Aunque, precisa, tampoco despeja todas las incertidumbres porque, entre otras cosas, pone límite de 25 años al cobro de primas para todas las instalaciones.

El presidente de AEF, Juan Laso, define la intención de Industria de forma gráfica: "Es un palo muy duro", asegura. Laso traduce a euros el recorte: donde una instalación cobraba 440 euros por megavatio-hora producido (huertos en funcionamiento antes de septiembre de 2008) se va a cobrar, en nuevas instalaciones, por debajo de 160 euros megavatio-hora. Mucho dinero.

Otra patronal, Asif, asegura estar "indignada" por el anuncio de una normativa que calificó de "muy perjudicial".

Las asociaciones comparten miedo, enfado, críticas hacia Industria y una esperanza: que la decisión pueda ser suavizada aprovechando su tramitación. En suma, que las negociaciones puedan continuar en septiembre. Será un mes complicado. Porque el Gobierno tendrá que estudiar si sube el recibo de la luz que se congeló en julio y porque Industria tendrá que decidir si mueve ficha para llegar a un gran acuerdo con el PP o se olvida de un pacto que, de momento, solo se ha traducido en la fotografía de la comparecencia conjunta, en junio, de Miguel Sebastián con el portavoz económico del PP, Cristóbal Montoro.

Sobre el posible pacto, el PP aseguró ayer que se está retrasando porque el Gobierno aún no ha concretado ninguna de sus demandas, si bien los populares no dan por rotas las negociaciones.