Elecciones en Reino Unido
Hace unas semanas, Nick Clegg era un desconocido. Periodista por un tiempo, eurofuncionario unos años, eurodiputado antes de llegar a los Comunes y, enseguida, discreto líder de los liberales-demócratas. Pero, desde que triunfara en el primer debate de las elecciones británicas, unos le llaman el Barack Obama británico.
Antes de que Nick Clegg ascendiera a los cielos mediáticos, había un político mucho más popular que él en el Partido de los Liberales-Demócratas: Vince Cable, portavoz de los asuntos del Tesoro. Los liberales-demócratas son un partido muy peculiar.
PATRICIA TUBELLA | Londres
La coalición de la democristiana Angela Merkel (CDU) con los liberales del FDP se presenta en dos semanas a una importante reválida regional. En Renania del Norte-Westfalia, una coalición análoga a la de Merkel se juega la reelección. Perder el Gobierno del Estado federal más poblado e industrializado del país sería ya un sonoro revés para la canciller.
Aunque la victoria de la fuerza de centro-derecha Fidesz, hasta ahora en la oposición, está garantizada en la segunda vuelta de las elecciones parlamentarias en Hungría que se celebran hoy, lo que se decidirá es si conseguirá su meta de reunir más de dos tercios de los votos, una histórica mayoría, que le daría libertad casi total para legislar y modificar la Constitución.
Una auténtica oleada de cólera se ha desatado entre la comunidad hispana de Estados Unidos tras la entrada en vigor en Arizona de una ley que, por primera vez en la historia de este país, permite a la policía detener y castigar a un ciudadano por el simple hecho de ser un inmigrante ilegal.
El primer ministro tailandés, Abhisit Vejjajiva, rechazó ayer la propuesta realizada por los camisas rojas para poner fin a la crisis política que vive Tailandia. Los manifestantes, que desde hace seis semanas han tomado el centro de Bangkok para pedir la dimisión de Abhisit, ofrecieron el viernes un compromiso por el cual estaban dispuestos a aceptar la disolución del Parlamento.