_
_
_
_
Crítica:FERIA DE ABRIL | La lidia
Crítica
Género de opinión que describe, elogia o censura, en todo o en parte, una obra cultural o de entretenimiento. Siempre debe escribirla un experto en la materia

El toreo

Antonio Lorca

El catedrático don Julián López, El Juli, subió al estrado, se plantó en la boca de riego, brindó a la concurrencia con parsimonia, abrió la muleta, habló pronto y claro y no tardó ni diez minutos en dictar una lección magistral que contó con el beneplácito de todos. Tema que desarrollar: el toreo. Y la disertación alcanzó tal grado de brillantez que el auditorio saltó de sus asientos, la ovación se hizo ensordecedora y la Maestranza parecía que se iba a venir abajo. A continuación, el presidente del tribunal sacó los dos pañuelos a un tiempo y la plaza entera ascendió a los cielos de la gloria taurina.

¿Qué dijo que tanta conmoción causó? Pues pasen y vean.

Vaya por delante que no era una lección fácil porque el toro cuarto de la tarde -el primero había sido un soso sin clase- fue un manso de libro en el caballo que huía del castigo. Y esa condición mostró al primer pase por alto. Pero el maestro apeló a su magisterio, le enseñó la muleta, se la acercó, le habló al oído, se colocó en el sitio justo y pareció decirle: "por aquí". Y el toro aceptó el reto, se olvidó de su sangre dulce y embistió con fiereza y codicia. Y toro y torero se enfrascaron en una lección emocionantísima de toreo verdadero, portentoso, espectacular, sublime y solemne. Con la mano diestra mandó larga la embestida en un par de tandas dominadas por la quietud y la ligazón. Arrastró la muleta en los naturales, emotivos, perfectos de colocación, cite y remate. Y volvió a la derecha para ahondar más sus argumentos de pases eternos, templadísimos, lentísimos, en una apasionada integridad de la lidia. Volvió a la zurda, y la plaza, extasiada, los tendidos en pie, rugían felicidad ante el momento esplendoroso del torero. Y se preparó para el acto final, y cobró una estocada en todo lo alto. Y se acabó. La Maestranza se volvió loca, se tornó blanca y una alegría desbordante se apoderó de todos.

TORREALTA / EL JULI, MANZANARES, LUQUE

Toros de Torrealta, correctos de presentación, blandos, mansos y sosos.

El Juli: casi entera atravesada (ovación); estocada (dos orejas).

José María Manzanares: media estocada (oreja); estocada (oreja).

Daniel Luque: estocada y un descabello (silencio); casi entera y descabello (silencio). Plaza de La Maestranza. Martes, 20 de abril. Decimotercera corrida de abono. Lleno.

Los tendidos, en pie, rugían felicidad ante el esplendor de El Juli

Y ¿por qué? Porque se había hecho presente el toreo auténtico en toda su dimensión. Y así de grande es esto, que hasta la gente más cuerda se vuelve chaveta, se da un abrazo sin conocerte de nada y te invita esta noche, sin falta, a su caseta porque ha sido feliz, porque ha sentido en sus venas el fuerte veneno de la emoción que se desprende del encuentro entre un toro encastado y un torero heroico y artista. Así es, nada más y nada menos, el toreo.

Pero la sesión no había terminado. Otro torero esperaba motivado en su burladero. Manzanares lo llaman, y salió ante el quinto, un manso muy deslucido, con ganas de comerse el mundo. Se dejó mirar y requetemirar la taleguilla, aguantó parones que parecían inaguantables y le robó muletazos muy estimables a un toro que, en apariencia, no tenía un pase. Y arrancó una meritoria oreja por decisión y valentía. Momentos antes, su banderillero Luis Blázquez recibió un golpe en la cara cuando intentaba apuntillar al toro. Más grande, si cabe, fue su labor en el segundo, al que entendió a mitad de faena, enfadado, quizá, por la falta de codicia de su oponente, y lo muleteó con intensidad en tres hermosas tandas de derechazos magníficamente interpretados.

Y quedaba el joven Luque, barbilampiño todavía y novato, que hizo lo que mejor pudo: intentarlo con toda su alma. Pero su primero era un marmolillo y el sexto, un soso desvaído. (Esta noche, sin falta, a la caseta del vecino...)

Julián López, <i>El Juli,</i> con su segundo toro.
Julián López, El Juli, con su segundo toro.JAVIER BARBANCHO
Volvía El Juli a la Maestranza tras su triunfal tarde del pasado viernes. El espada hizo el paseíllo junto a Manzanares, un torero muy del gusto de Sevilla, y junto al joven Daniel Luque, para enfrentarse a los toros de Torrealta. El banderillero Luis Blázquez, herido grave en el rostro. <a href="http://www.elpais.com/toros/feria-de-abril/"><b>Vídeos de la Feria de Abril</b></a>
Toda la cultura que va contigo te espera aquí.
Suscríbete

Babelia

Las novedades literarias analizadas por los mejores críticos en nuestro boletín semanal
RECÍBELO

Suscríbete para seguir leyendo

Lee sin límites
_

Sobre la firma

Antonio Lorca
Es colaborador taurino de EL PAÍS desde 1992. Nació en Sevilla y estudió Ciencias de la Información en Madrid. Ha trabajado en 'El Correo de Andalucía' y en la Confederación de Empresarios de Andalucía (CEA). Ha publicado dos libros sobre los diestros Pepe Luis Vargas y Pepe Luis Vázquez.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_