Los socialistas rectifican de nuevo y frenan el pacto urbanístico con el PP

Del sí a la abstención para volver al sí y, nuevamente, a la abstención. El PSdeG consumó ayer una nueva rectificación sobre la reforma de la Lei do Solo, después de que el presidente de la Xunta declarara que el texto negociado por populares y socialistas no impedirá la construcción de la piscifactoría de Touriñán, como sostiene el PSOE. "Feijóo ha volado el acuerdo por los aires, tenemos que repensarlo", certificó la diputada del PSdeG Mar Barcón, encargada de las negociaciones.

El cambio de postura de los socialistas se produce después de que el líder del partido, Pachi Vázquez, abroncara a sus diputados María José Caride, Ismael Rego y Pablo López Vidal por oponerse a apoyar la reforma. El artículo que vuelve a bloquear el acuerdo es el 39, que condiciona las piscifactorías en Red Natura, como la de Touriñán, a que la evaluación de impacto ambiental "constate que no se afecta de manera apreciable" a los hábitat o especies prioritarios o comunitarios catalogados conforme a la directiva Hábitats.

El PSdeG amaga con la abstención a causa del proyecto de Touriñán

La autorización de las piscifactorías queda en esos casos pendiente de informes que debe certificar la Xunta, y Feijóo se apresuró a aclarar que su Gobierno no frenará el proyecto de Touriñán. Populares y socialistas harán un nuevo esfuerzo "interpretativo" el lunes, víspera de la votación de la ley en el Parlamento.

Si el jueves era un gran proyecto, ayer ya no servía. La reforma de la Lei do Solo se ha convertido en un calvario para el PSdeG, que después de un maratón negociador con el Partido Popular, y a cuatro días de que el proyecto se someta a aprobación definitiva, está otra vez en la más absoluta indefinición sobre el sentido de su voto. La preferencia ahora es la abstención, sólo dos días después de que el líder socialista, Pachi Vázquez, se enfrentara al sector del grupo parlamentario que discrepa del apoyo a la reforma del PP.

El distanciamiento de los populares se produce nuevamente por el artículo 39, el mismo que ya amenazó el pacto la semana pasada, y que regula los usos en espacios naturales protegidos. O lo que es lo mismo: la piscifactoría de Touriñán, en cuyo rechazo ha querido simbolizar el PSdeG su estrategia negociadora. El posterior acuerdo que cerraron socialistas y populares "bloquea Touriñán", según el PSOE. La Xunta discrepó de esa interpretación, pero fueron las palabras pronunciadas el jueves por Alberto Núñez Feijóo las que han acercado al PSdeG nuevamente a la abstención. El presidente sostuvo que la redacción pactada permite hacer piscifactorías en Red Natura y reiteró su voluntad de desarrollar concretamente la de Touriñán.

"Feijóo ha volado el acuerdo por los aires, tenemos que repensarlo", declaró ayer la socialista Mar Barcón, encargada de las negociaciones con el PP. Con sus declaraciones, añade, el presidente "está cuestionando la literalidad del acuerdo". Aunque los socialistas conocían las palabras del presidente desde mediodía del jueves, no fue hasta ayer cuando reconocieron públicamente "su gravedad". "Nos hemos dado cuenta de que ha venido a decir que el Parlamento habla, pero que la Xunta manda, y eso es muy grave", se justificó Barcón.

Las continuas rectificaciones vienen marcando la posición del PSdeG en la reforma de la ley. La presión de los alcaldes socialistas provocó el apoyo inicial al proyecto, enmarcado en una propuesta de acuerdo más amplio, el denominado pacto por el territorio. Cuando la ley se admitió a trámite, y en pleno debate del proyecto, Pachi Vázquez impuso al grupo que se abstuviera en la votación de la enmienda a la totalidad del BNG, a pesar de que la víspera se había acordado votar en contra. Dos días antes, un artículo en EL PAÍS del ex presidente socialista Emilio Pérez Touriño con duras críticas a la ley había encendido las alarmas entre los diputados.

Después de que las negociaciones en la ponencia parlamentaria avanzaran sin obstáculo, con la aprobación de 33 de las 45 enmiendas presentadas por el PSdeG, apareció súbitamente el artículo 39, que, según los socialistas, suponía un aval legal a la planta de Touriñán y por extensión a la instalación de piscifactorías en la Red Natura. Ante la falta de acuerdo, el PSdeG se abstuvo el martes del informe elaborado por la ponencia legislativa. Quedaba tiempo para la negociación, advirtieron tanto socialistas como populares, y, en efecto, la noche del martes, Barcón cerró el acuerdo con el PP sobre el artículo 39.

El siguiente capítulo se produjo al día siguiente. Entre los diputados socialistas cundió el desconcierto al recibir en sus correos electrónicos un argumentario de respaldo a la ley, remitido por la dirección del grupo. Pachi Vázquez trató de aplacar la situación con una reunión improvisada en la que explicó el pacto con el PP, pero se encontró con la oposición de los diputados más próximos a Touriño, como María José Caride, Ismael Rego y Pablo López Vidal. La reunión fue tensa, y concluyó con una llamada de Vázquez a la disciplina de partido. La dirección del grupo trataba ayer de desvincular la nueva rectificación de las críticas de los touriñistas, para atribuirla a las declaraciones de Feijóo.