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El escándalo de los abusos sexuales

El profesor que hablaba de sexo

La noticia de que José Ángel Arregui había sido detenido con filmaciones de abusos cometidos en tres colegios españoles generó ayer preocupación en estos centros. Mikel (nombre ficticio) reconocía ayer que varios compañeros del Colegio San Viator de Vitoria se cruzaron correos electrónicos para intercambiar impresiones sobre el docente que "tenía comportamientos raros. A veces hablaba de sexo en clase". En más de una ocasión sacó a compañeros del aula, mientras el profesor de prácticas cuidaba la clase. Mikel reconoce que aquella forma de actuar cobra sentido ahora, una vez conocida la noticia de su presunta pederastia. Entonces, suponían que eran excentricidades. "Pensábamos que las salidas de clase era para advertir a los compañeros sobre su trayectoria académica; a lo sumo, sobre su comportamiento en clase", comenta Mikel. "En alguna de esas grabaciones, sospecho que estuvo algún compañero o conocido de aquella época".

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El director del centro, Daniel Fernández, se remitía ayer a la nota oficial de San Viator en España: "Estamos muy preocupados, por supuesto, pero en aquellos años no hubo quejas ni de padres ni de otros profesores".

Juan Antonio Elgoibar, director del colegio San José en Basauri (Vizcaya), no coincidió con José Ángel Arregui. El religioso ejerció en el centro vizcaíno en el curso 97/98. Sólo estuvo un año, el tiempo suficiente como para que nadie reconociese ayer haberle conocido. "Fue tutor de 3º de ESO, además daba clases de Gimnasia, Lengua, Religión y Sociales, también a chavales de 1º y 2º de Secundaria". El responsable del colegio llegó dos años más tarde, en el curso 99/00. Ni antes ni después de su llegada recibió ningún tipo de queja, ni de alumnos, ni padres o profesores que pudiesen haber notado algo raro. "Es una sensación de extrañeza y desolación. No entendemos qué pudo haber pasado. Además, este es un colegio muy pequeño, cosas de este tipo acabarían saliendo porque el grado de comunicación entre los profesores es muy alto", dijo ayer a las puertas del centro. Elgoibar se enteró de la investigación sobre uno de los ex docentes del San José a finales de enero. Informó de la situación al Consejo Escolar y a la Asociación de Padres y Alumnos. Aún así, varios profesores, con monosílabos y paso acelerado, aseguraban ayer a las puertas del centro que se acababan de enterar. Sólo uno de ellos reconoció, con un gesto, haber coincidido con Arregui.

"Mis hijos todavía son muy pequeños para que les haya dado clases", respondía una de las madres, con la compra recién hecha. Aunque con gesto de preocupación, abuelas y progenitoras, tras un rápido cálculo mental, suspiraban aliviadas al enterarse de que Arregui pasó por allí a finales de los noventa.

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