GM pide ayudas de 2.700 millones para el plan de Opel

La automotriz alemana Opel necesitará 2.700 millones de euros en ayudas públicas para su reestructuración. En total, la matriz General Motors (GM) planea una inversión de 11.000 millones durante los próximos cinco años en el reflotamiento de Opel, al tiempo que suprimirá 8.400 empleos de los 48.000 que mantiene en toda Europa.

Durante la presentación del esperado plan de reestructuración, el consejero delegado, Nick Reilly, explicó en Francfort que Opel aspira a ser rentable en 2012. Este plan diseñado por GM contempla reducir en 900 puestos de trabajo la plantilla de su fábrica en Figueruelas (Zaragoza). Según se supo ayer, Opel pretende mantener allí las dos líneas de producción en funcionamiento.

Zaragoza será la principal planta para automóviles pequeños en 2013

El director de producción de Opel y Vauxhall, Reinald Hoben, explicó además que Opel planea convertir Figueruelas en la principal fábrica de vehículos pequeños a partir de 2013. Así, en caso de que los planes de saneamiento funcionen como prevé GM, la planta zaragozana fabricará el nuevo modelo Combo y algunas variantes del Corsa. Sin embargo, parte de la producción del Corsa de tres puertas va a trasladarse de Zaragoza a Bochum (Alemania). Además, Opel cerrará la planta de Amberes (Bélgica), que tiene 2.400 trabajadores. En Alemania caerán 3.900 empleos, 1.800 de ellos en Bochum y 865 en el centro de producción de Rüsselsheim, en el Estado de Hesse, sede de la marca Opel y de la filial europea de GM. En Rüsselsheim se perderán 650 del total de 1.300 puestos administrativos que se recortarán. Opel pide a sus trabajadores que reduzcan sus salarios en 265 millones de euros anuales para la reestructuración. El rechazo sindical es tajante. Klaus Franz, jefe del Comité de Empresa, dijo ayer que ni siquiera hay conversaciones previstas al respecto.

Según el Gobierno alemán, Opel ha solicitado ya 1.500 millones en ayudas y avales del erario público y pretende acogerse al "plan Alemania" de reactivación preparado para combatir la crisis. Los expertos dudan de que Opel pueda acceder a estos fondos, reservados para empresas cuyas dificultades son consecuencia directa de la crisis actual.

El ministro de Economía alemán, el liberal Reiner Brüderle (FDP), confirmó que el Gobierno estudia la solicitud. Por su parte, el primer ministro de Hesse, peso pesado del partido democristiano de Angela Merkel (CDU), advirtió de que GM "deberá aumentar sensiblemente su inversión" en el saneamiento de Opel.

Desde la Comisión Europea se aseguró ayer que Bruselas "impedirá una carrera de subvenciones" a Opel para mantener puestos de trabajo. De momento, ningún Gobierno ha presentado sus planes de ayuda ante la UE. La Comisión quiere asegurarse de que el dinero invertido vaya al desarrollo de nuevos modelos y a la recuperación de la marca.