PSE y PP aplican el "rodillo" y sólo aprueban dos enmiendas del PNV
Los partidos de la oposición censuran la nula receptividad a sus propuestas
Los grupos parlamentarios iban a estar dos días debatiendo las enmiendas parciales para los presupuestos de 2010, pero al final les sobró uno. El PSE y el PP se llevaron por delante en la Comisión de Presupuestos del Parlamento vasco alrededor de 950 de las 1.019 enmiendas que presentó la oposición. Salvo una decena, que transaccionaron todos los grupos -medio centenar del PP, siete de UPyD y dos, de carácter técnico del PNV- el rodillo de los partidos que sustentan al Gobierno no dio ninguna oportunidad para alterar la redistribución interna de las cuentas públicas.
De hecho, todas las modificaciones aprobadas después de ocho horas de debate apenas si suponen 18 millones de euros, el 0,1% de un presupuesto de 10.315 millones, que quedará definitivamente aprobado, con el menor rechazo de los últimos 10 años, en el pleno previsto para el próximo día 23.
El total de los cambios supone el 0,1% de las cuentas para 2010
El portavoz del PNV, Joseba Egibar, ya había anunciado que se abstendrían durante la votación de las cuentas y, en consecuencia, sus representantes se abstuvieron ayer durante la votación del dictamen de la comisión, que se llevará al pleno la próxima semana. Es una de las servidumbres del pacto para no obstaculizar los presupuestos de las instituciones en tiempos de crisis y que también ha llevado al PSE propiciar los de las tres diputaciones vascas, pese a estar en manos del PNV.
El PNV se abstendrá, aunque no ha logrado modificar el destino de un sólo céntimo de las cuentas para 2010, aunque sí ha alterado el calendario de la transferencia de las políticas activas de empleo. El PSOE y Rodríguez Zapatero le concedieron un derecho de veto como contrapartida a su apoyo de los Presupuestos del Estado, que ha sentado muy mal al Gobierno vasco y el PSE. Por todo ello, los grupos parlamentarios no tenían demasiadas dudas de que el debate de ayer iba a pasar sin pena ni gloria, pero, por si quedaba alguna duda, el parlamentario popular, Antonio Damborenea, lo dejó muy claro poco después de las nueve de la mañana. Ante las críticas de los nacionalistas sobre "el rodillo" que estaban aplicando PP y PSE, el popular les respondió que se trata de un modelo heredado. "El PP presentó más de ochocientas enmiendas al proyecto de presupuestos de 2009 y ustedes [el tripartito PNV-EA-EB] no aceptaron ninguna. Se aplica lo mismo que se ha recibido", sentenció.
La portavoz de Aralar, Aintzane Ezenarro, agradeció ácidamente al PP su claridad al poner blanco sobre negro que "lo que están haciendo es revanchismo", al tiempo que acusó al PSE de "seguir disimulando". La portavoz socialista, Joana Madrigal, recogió el guante y reprochó a Ezenarro "de pactar con el diablo antes que con los socialistas" y de buscar el enfrentamiento en vez del acuerdo.
Se trata de unos rifirrafes que se reproducen todos los años por estas fechas, pero en esta ocasión con las siglas cambiadas. Lo que hasta el pasado año hubieran dicho socialistas y populares, ayer le tocó decirlo al PNV. El parlamentario de este Luke Uribe-Extebarria resumió que el rechazo del 99,99% de las enmiendas del PNV "es un auténtico veto a la oposición".
Lanbide no cambia
De momento el Servicio Vasco de Empleo-Lanbide será creado como un ente público de derecho privado. Aunque todos los partidos y sindicatos, salvo el PSE y la consejera Gemma Zabaleta, apuestan por crearlo como un organismo autónomo, es decir con una mayor vinculación pública y con presencia de un interventor y de control presupuestario, el PP fue fiel al pacto con el PSE. Ayer no sumó sus votos al resto de la oposición, por lo que se mantiene la fórmula que figura en los presupuestos, a la espera de que durante la tramitación parlamentaria de la futura Ley de Empleo se cambie o no la personalidad jurídica de Lanbide.
De hecho, la propia consejera admitió la pasada semana que está abierta a una negociación en el seno de la mesa de diálogo social y a reunirse con los partidos de la oposición para pactar un sistema a gusto de todos.
La portavoz del PNV, Ana Otadui, se quejó, tras comprobar que PSE y PP tumbaron todas las enmiendas para alterar la fórmula de Lanbide, de que no tenía mucha lógica esperar a la presentación de la ley, cuando ésta no iba a llegar, al menos, hasta el segundo trimestre de 2011. "Nadie está de acuerdo con ese asunto, y ustedes no lo cambian", dijo. Madrigal se limitó a recordar que la consejera ya ha anunciado la apertura de una ronda para tratarlo.
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