El silencio de Fomento sobre El Prat dispara las alarmas en la Generalitat

Inmersos en la batalla del Tribunal Constitucional y en evitar que le salten las costuras por la reforma del impuesto de sucesiones, el Gobierno catalán teme ahora que se le reabra un frente tan conocido como espinoso: la gestión del aeropuerto de El Prat y el traspaso de los aeródromos de Reus, Girona y Sabadell. El asunto ha envenenado las relaciones entre el Gobierno y la Generalitat durante toda la legislatura y lleva camino de no solucionarse en el plazo fijado por el ministro de Fomento, José Blanco. Éste se comprometió el pasado mayo a pactar el asunto "antes de fin de año", pero el Gobierno catalán no ha recibido propuesta alguna cuando quedan tres semanas para finalizar el ejercicio.

En los próximos días el Gobierno catalán volverá a reivindicar ante Fomento la necesidad de cumplir los plazos. Lo hará previsiblemente en la comisión mixta que debe servir para finiquitar otro asunto que se ha arrastrado toda la legislatura: el traspaso de Cercanías, en el que todavía quedan pendientes algunos flecos técnicos. Los departamentos de Política Territorial y Relaciones Institucionales, así como el propio presidente de la Generalitat, José Montilla, están ejerciendo presión ante el Gobierno central sin que de momento se haya desencallado. Fuentes del tripartito reconocen que es "difícil" tener un acuerdo antes de fin de año y confían en que la de Blanco no sea otra promesa incumplida del Gobierno central. Con el asunto de los aeropuertos encallado, el tripartito se propone centrar sus esfuerzos en cerrar definitivamente el traspaso de Cercanías, que entra en vigor el 1 de enero, aunque ello obligue a aplazar unas semanas el debate aeroportuario.

El Gobierno catalán confía en que el ministro José Blanco haga algún tipo de anuncio la próxima semana, cuando tiene prevista una visita a Barcelona.

Política Territorial ha enviado ya una brigada de expertos de la empresa ferroviaria catalana Ferrocarrils de la Generalitat (FGC) a analizar cómo funciona el servicio de Cercanías. Esto no supone que Renfe se vaya a integrar en FGC. La intención del Ejecutivo catalán es crear un consorcio con una dirección paritaria (tres miembros designados por Fomento y tres por Política Territorial), donde el presidente sea nombrado desde Cataluña y tenga voto de calidad. De momento, Renfe ha optado ya por remitir copia de sus notas informativas al Gobierno catalán antes de emitirlas.

Mientras, el alcalde de El Prat de Llobregat (Baix Llobregat), Lluís Tejedor (ICV), afirmó ayer que las propuestas del Ministerio de Fomento sobre el nuevo modelo de gestión del aeropuerto de El Prat son "inaceptables". Tejedor recordó que el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, se comprometió a acordar un nuevo modelo antes de finalizar este año.

Tejedor apuntó que es "urgente" la definición de un nuevo modelo de gestión del aeropuerto de El Prat ya que, al estar gestionado por AENA, mantiene una situación de "desventaja" respecto al aeropuerto de Madrid Barajas. "AENA debe garantizar que Barajas tenga éxito caiga quien caiga y el aeropuerto de El Prat corre peligro de convertirse en un aeropuerto de compañías de bajo coste", aseguró el alcalde.