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Ningún juez quiere al pirata

El somalí Abdu W. ingresa en un centro de internamiento de menores después de que los jueces se pasasen la pelota y técnicamente estuviera libre

Ningún juez de la Audiencia Nacional quiere al pirata. El somalí Abdu W., cuya edad indeterminada entre 17 y 19 años ha dado lugar a un auténtico vodevil en los últimos días, ingresó ayer por fin en un centro de menores de régimen cerrado -por un plazo de 15 días prorrogables-, después de que el juez central José Luis de Castro admitiera una petición del fiscal para su internamiento.

No es que De Castro se haya hecho cargo del caso, que no, sino que ha aceptado aplicar la medida cautelar mientras se resuelve el conflicto negativo de competencias que ha planteado a su compañero Santiago Pedraz y que tendrá que resolver la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional.

Porque De Castro, basándose en los informes periciales realizados en el Hospital la Paz de Madrid, los forenses de la propia Audiencia y una clínica privada dependiente de la Comunidad de Madrid, estableció que el supuesto pirata Abdu W. es mayor de edad y por tanto, como él es el juez de menores no es competente para investigar y juzgar los delitos que pueda haber cometido. Por ello, el jueves dictó un auto por el que se inhibía del caso y lo devolvió al juez que inicialmente era competente, Santiago Pedraz.

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Sin embargo, Pedraz, ayer volvió a estudiar todos los informes periciales relativos a la edad del pirata y concluyó que ninguno de ellos aseguraba al 100% que Abdu W. era mayor de 18 años, por lo que, al existir una duda, aunque mínima, debía inclinarse en favor del reo y declarar que él tampoco es competente para continuar el proceso que existía contra él en el que estaba acusado de asociación ilícita, 36 delitos de detención ilegal, robo con violencia y uso de armas.

Pedraz se negó a celebrar la comparecencia solicitada por el fiscal en la que pedía el ingreso en prisión del pirata, rechazó la inhibición efectuada por el juez central de menores y ordenó que se le devolviera la causa.

Pero De Castro tampoco aceptó la resolución de Pedraz porque estimaba ya se había inhibido de la causa por estimar que el pirata era mayor de edad.

Mientras los jueces se peloteaban la causa, en un espectáculo perfectamente legal, pero absolutamente de locos, el pirata Abdu W. estuvo técnicamente libre aunque retenido en los calabozos de la Audiencia Nacional.

Ante la negativa de ambos jueces de hacerse cargo de la situación del pirata, la policía se puso nerviosa ante la eventualidad muy real de tener que dejar en la calle a un tipo que -sea mayor o menor de 17 años- participó en el secuestro del atunero español Alakrana en aguas internacionales frente a Somalia y repelió la agresión de los militares españoles cuando fueron a detenerlo el pasado 3 de octubre.

Los agentes intentaron contactar con la Comunidad de Madrid para que un centro de protección se hiciera cargo de él, a la vista de que podría tratarse de un menor extranjero, que no tiene recursos, ni conoce el idioma ni sus padres están en España. Pero precisamente los facultativos de la Comunidad de Madrid son los que habían valorado que del desarrollo y dentición de Abdu W. se podía asegurar que era mayor de edad.

Finalmente, cuando la situación era poco menos que desesperada, el juez De Castro aceptó celebrar la vistilla propuesta por la fiscalía y ordenar el internamiento provisional durante 15 días prorrogables, en tanto se tramita la cuestión de competencias ante la Sala de lo Penal.

Paralelamente, la fiscalía recurrió directamente ante la Sala la decisión de Pedraz por entender que el pirata es mayor de edad y que el caso le corresponde. "Llama poderosamente la atención lo argumentado por el juez y el forense de determinar una edad de 17 años sin haber practicado pericia alguna de carácter científico técnico y sin embargo rechacen una pericia concluyente, indubitada y clara, basadas en parámetros medibles y cuantificables que fijan con creces una mayoría de edad de 18 años", dice el fiscal.

El culebrón del pirata seguirá la próxima semana cuando la sala tenga que pronunciarse sobre el recurso del fiscal y sobre el conflicto de competencias que los jueces Pedraz y De Castro mantienen.

Mientras tanto, Abdu W. esperará en un centro de menores pero en régimen cerrado.

Concentración en Bermeo (Vizcaya) en apoyo a los pescadores del <i>Alakrana</i> secuestrados por piratas somalíes.
Concentración en Bermeo (Vizcaya) en apoyo a los pescadores del Alakrana secuestrados por piratas somalíes.SANTOS CIRILO

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