El consejero Aguirre ve la fusión de las cajas vascas "tras la crisis"

Carlos Aguirre, consejero de Economía y Hacienda, está convencido de que las tres cajas vascas, con cuyos presidentes ya se ha reunido, "acabarán fusionándose". Sin embargo, no aventura fechas, aunque sitúa ese momento "una vez acabe este convulso período", en referencia expresa a la crisis económica. Así lo expresó en su intervención en el Fórum Europa, celebrado ayer en Bilbao horas antes de su comparecencia en el pleno del Parlamento vasco.

Aunque de educación jesuítica, el consejero dio la vuelta a la máxima de san Ignacio y apuntó que ante el dilema, en un momento de convulsión, de "si hay que hacer mudanza o esperar a que este temporal escampe, igual es mucho más lógica esta segunda posibilidad". Sobre el futuro de las cajas, y con el presidente de BBK, Mario Fernández, a su lado, Aguirre recordó ante una pregunta del consejero del BBVA Román Knörr que los estatutos de estas entidades de ahorro "marcan unas reglas de juego" que "hacen difícil fusiones entre comunidades autónomas". Así se posicionaba sobre la supuesta puja de BBK por Caja Castilla-La Mancha, que un día antes había enfriado el propio Fernández. De hecho, Aguirre alertó de que "puede ocurrir el caso de que cajas de una extraordinaria rentabilidad y eficiencia, como son las vascas, entrando en determinados procesos, pierdan su autonomía porque los estatutos marcan unas condiciones de control que son los que son". Con mayor contundencia, agregó que la BBK "entrará en las condiciones que tenga que entrar" y consideró que "no entrará en un sitio en que su condición va a ser peor que la que tenía ahora".

"BBK no entrará en un sitio en una condición peor de la que tiene ahora"

El consejero, que fue presentado por la diputada socialista Arantxa Mendizábal, hizo una lectura nada optimista sobre la suerte de la economía española y vasca, que tendrá una incidencia directa, principalmente, en el aumento del paro. Consideró que el tercer trimestre de este año puede constituir "el punto más bajo del ciclo económico que se está viviendo", y aseguró que el PIB caerá en Euskadi un 2,9 % al finalizar 2009 y se perderán 34.000 puestos de trabajo, menos que la destrucción de empleo prevista para 2010.

En una traslación directa a los próximos Presupuestos, admitió que "va a haber un recorte muy importante en casi todas las partidas del Gobierno", excepto Educación y Sanidad, aunque no lo concretó hasta que esté "cerrada" la estimación de ingresos, que podría conocer hoy.

Durante su discurso, Aguirre apeló a la necesidad de practicar el diálogo social y el institucional, principalmente con las diputaciones. Sobre las relaciones con éstas aseguró que "son mucho más positivas que lo que se refleja en los medios de comunicación; hay mucha colaboración".