Rajoy evita aclarar qué votará el PP en el Congreso sobre el blindaje

Los dirigentes vascos del PP escucharon ayer decir a su presidente nacional, Mariano Rajoy, que el PP "ha estado y estará" con el Concierto Económico, pero no lograron, ni en su intervención pública en Vitoria, ni en la reunión privada que mantuvieron con él, ninguna garantía sobre el voto del grupo popular en el Congreso la semana próxima.

El día 13 se debate la proposición de ley del Parlamento autonómico que pretende dar rango de ley a las normas fiscales vascas, de modo que sólo puedan ser recurridas ante el Tribunal Constitucional. Es lo que se ha dado en llamar "blindaje" del Concierto, y ese término, se ha convertido en sí mismo en un obstáculo que los populares vascos se esfuerzan en remover. El otro es la intervención del PNV ligando la cuestión a la negociación presupuestaria en Madrid. A este segundo factor se refirió el presidente del PP vasco, Antonio Basagoiti, que acusó al PNV de estar "malmetiendo" y "emponzoñando" la cuestión, presentándolo de un modo que solivianta a otras comunidades autónomas. "Está haciendo un flaco favor al Concierto", afirmó, al dar la impresión de que éste es "un privilegio" y usar "un activo de todos" para "agredir" a las demás formaciones que también apoyaron la propuesta que debatirá el Congreso.

Toda la cúpula del PP vasco se reunió con su líder para hablar del asunto

"Actuaremos con sentido común", fue todo lo que Rajoy precisó, después de mostrar su disposición a "hablar con todo el mundo, sin que nadie pretenda patrimonializar nada, ni echar nada a la cara de nadie".

Rajoy se reunió ayer con el presidente del PP vasco, Antonio Basagoiti, el secretario general, Iñaki Oyarzabal, los tres presidentes y los tres secretarios generalales provinciales y su portavoz en el Parlamento, Leopoldo Barreda. Con ellos estaba también Antón Damborenea, que formará parte el martes próximo de la delegación del Parlamento que defenderá en el Congreso la propuesta de la Cámara vasca y que puede encontrarse con el rechazo de sus propios correligionarios. Dos de los asistentes a esa reunión aseguraron a este periódico que en privado Rajoy no les avanzó más de lo que dijo en público después. Pero valoraron que no respaldara la declaración contraria de la secretaria general del partido, María Dolores de Cospedal, y también resaltaron como elemento esperanzador lo que consideran una "reconducción" por parte de ésta.

Rajoy acudió a Vitoria para inaugurar la nueva sede del PP. Fue su tercer acto de la jornada y, como los dos anteriores, lo realizó blindado a las preguntas de los periodistas. No respondió a ninguna de las que se le realizaron a su llegada, ni tampoco en relación con el caso Gürtel. Sí manifestó en su intervención su pleno respaldo al acuerdo PSE-PP en Euskadi, del que dijo que sólo Rodríguez Zapatero "está en condiciones de romper".