El PP le restriega a Zapatero las "disensiones" en su partido

El PP no desaprovechó ayer su primera oportunidad parlamentaria para cuestionar la autoridad de José Luis Rodríguez Zapatero entre los suyos. Mientras hacía una de sus panorámicas críticas al Gobierno, esta vez a cuenta de la pretendida subida de impuestos, Pío García-Escudero añadió: "Hasta en su grupo y en su partido empiezan a perder la confianza en usted y a dejarlo solo". El portavoz del PP en el Senado se recreó en la desconcertante falta de detalles de la subida impositiva. Pero además, consideró que Zapatero minimiza la subida como, según él, hizo con el atentado de la T-4.

"Qué mal estilo, qué mal estilo". A pesar de este inicio de réplica, la intervención de Zapatero estuvo muy lejos de la moderación y acabó gritando al PP que "nunca han hecho política de solidaridad". Dos horas después, el ministro de Trabajo precisaba un poco más esta idea: "Ustedes son una amenaza para el Estado de bienestar", le dijo a una senadora del PP. Zapatero reiteró que la subida de impuestos, "moderada, responsable y en parte temporal", es para pagar el refuerzo de la protección social y la inversión pública para mantener el empleo. Zapatero tampoco definió ayer en qué consistirá la subida.

El inusual tono de voz de Zapatero, a pesar de su enfado evidente, resultaba imprescindible para oírlo. Los senadores del PP alimentaron una escalada de rumores que se convirtió en comentarios a voces, gestos y abucheos. Al final del duelo, a alguno se le ocurrió agitar unos papeles blancos y gritar "¡la oreja! ¡la oreja!". Decenas de senadores del PP lo imitaron. La escena terminó con el presidente gritando: "¡Les recuerdo que estamos en el Parlamento!", y las risas desde los escaños del PP.