El Banco de España y el BCE chocan por la política fiscal

El gobernador del Banco de España, Miguel Ángel Fernández Ordóñez, apoyó ayer la propuesta de aumentar los impuestos indirectos anunciada por el presidente José Luis Rodríguez Zapatero porque, en su opinión, "siempre es mejor subir los impuestos que no desincentivan el trabajo y el crecimiento". Tras cerrar en San Sebastián un curso de verano, Fernández Ordóñez dijo que elevar la presión fiscal con el IVA y los impuestos sobre el petróleo, el alcohol y el tabaco es "lo menos dañino", aunque al mismo tiempo abogó por abordar también "reformas estructurales" que favorezcan la creación de empleo y mejoren la productividad.

En sentido contrario se expresó José Manuel González-Páramo, miembro del consejo de gobierno del Banco Central Europeo (BCE), que, sin criticar directamente la subida de impuestos, puso en duda su efectividad. "Muchas consolidaciones en el pasado", en Europa y fuera de ella, que, "empezando por impuestos, han fracasado finalmente", ya que pese a reducir el déficit al inicio, éste "volvió a reemerger", aseguró. González-Páramo considera que la recuperación depende de lo que hagan los Gobiernos y que la subida de impuestos "resta renta disponible". González-Páramo abrió la puerta a que el BCE suba los tipos de interés antes de retirar las medidas extraordinarias de liquidez. "Todas las opciones están abiertas", señaló en unas jornadas en Málaga organizadas por Unicaja y Funcas.

La vicepresidenta Salgado deja la puerta abierta a un incremento del IVA

El secretario de Estado de Hacienda, Carlos Ocaña, señaló en las mismas jornadas que la subida de impuestos para el año próximo permitirá una mejora sustancial en las cifras de déficit público. El Ejecutivo va a corregir a la baja el agujero fiscal para 2010, hasta ahora cifrado en el 7,9% del producto interior bruto (PIB). Ese porcentaje, aprobado hace sólo tres meses, se ajustará a la mejora de la recaudación que el Gobierno espera lograr con la subida de impuestos. La nueva cifra se presentará junto a las grandes líneas de los Presupuestos Generales del Estado, a finales de mes. Según los nuevos cálculos, la ganancia de 15.000 millones de euros más para el año próximo dejará el déficit en algo más del 6% del PIB.

La cifra resulta excesivamente optimista si se tiene en cuenta que este año las cuentas públicas cerrarán con un desequilibrio en torno al 10% del PIB y que, por mucho que se recorte el gasto el año próximo, las prestaciones por desempleo pueden volver a descuadrar los cálculos, como ha ocurrido este año.

Por su parte, la vicepresidenta económica, Elena Salgado, no aclaró si el Gobierno está pensando en el IVA o en los especiales al hablar de una subida de los impuestos indirectos, informa Luis Doncel. Salgado señaló tras el Consejo de Ministros que estos gravámenes son los que menos distorsionan la actividad económica y dejó la puerta abierta a una subida del IVA.