"No abandonaré mi sueño de paz"

Los músicos de la Orquesta Árabe de Barcelona aparecieron sobre el escenario junto a Noa y, de repente, se elevaron hacia el cielo globos, se desplegaron pañuelos palestinos y banderas de ese país con los colores verde, blanco y negro, y se oyó un zumbido de silbidos. El boicoteo estaba en marcha. Activistas de la plataforma Aturem la Guerra habían repartido en la entrada al parque de la Ciutadella octavillas explicando que Noa se negó a condenar el bombardeo sobre Gaza en enero. Con veteranía, la cantante israelí soportó los abucheos, interpretó sin inmutarse una bella versión de El cant dels ocells y acabó con un discurso en catalán en favor de la paz entre su país y Palestina.

"No se puede consentir un boicoteo así", dice el consejero Saura

El episodio del boicoteo tuvo tintes esperpénticos y estuvo rodeado de escenas muy tensas. Mientras Noa cantaba, la mayoría del público, puesto en pie, aplaudía y unos 40 activistas silbaban. El grupo le daba la espalda a la cantante y lucía cartulinas en favor de Palestina. Todos estaban sentados en el bloque de sillas de la izquierda, el más próximo a la cascada del parque, que estaban ocupadas por ciudadanos de a pie. El bloque de la derecha, más a la sombra, era el reservado a las autoridades. Allí estaban los dirigentes de Iniciativa per Catalunya-Verds, que cumplieron con su amenaza de realizar una protesta mucho más discreta: llevaban un pin con los colores de Palestina. El consejero de Interior, Joan Saura, y el diputado Joan Herrera no lo lucían.

"¡Fuera! ¡No soy palestino! ¡Soy catalán!", se escuchó más de una vez. Varios ciudadanos increparon e insultaron a los activistas que, impasibles, prosiguieron con su protesta. Los músicos tuvieron un gesto de complicidad con Noa cuando acabaron de tocar El cant dels ocells. Los abucheos, eso sí, cesaron cuando ella interpretó la segunda pieza: La vida es bella.

"No abandonaré nunca mi sueño de cantar en la firma del tratado de paz entre Israel y Palestina", dijo la solista en un discurso leído en catalán en el que recordó que ha ofrecido más de un centenar de conciertos en los últimos 15 años. "Solemos mirar al Oeste para solucionar los problemas y vemos cómo este continente los soluciona con el diálogo".

La situación provocó una enorme incomodidad a Saura, que mantuvo en enero un enfrentamiento con Israel tras participar en una marcha en contra de los bombardeos en Palestina. "Lo que no se puede aceptar y consentir es el intento de boicoteo a la cantante Noa", dijo Saura a Onda Cero. Con todo, la oposición al completo cargó contra Iniciativa per Catalunya por haber promovido la protesta. El presidente de la Generalitat, José Montilla, también lamentó lo sucedido. "Algunos le han hecho un flaco favor a la causa Palestina", dijo.