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Reportaje:

Mientras usted no estaba

Una lista de canciones ilustran las noticias de julio para los que vuelven hoy de vacaciones. Del himno gay de Chueca a los gorgoritos de Aguirre

Patricia Gosálvez

Un año más estamos sin canción del verano. Los que vuelven hoy de vacaciones lo habrán comprobado en verbenas y chiringuitos. Para ellos, que se perdieron lo que pasó en Madrid durante el mes de julio, va este resumen musicado. Cierren los ojos, imaginen que siguen en la playa, y escuchen a qué sonó la ciudad durante los últimos 30 días.

- 'I will survive' (Gloria Gaynor). El mes arrancó con un susto: en 2010 el Orgullo saldrá de Chueca. Lo anunció el día 1 la Concejalía de Medio Ambiente, tras una reunión con los organizadores. Las asociaciones homosexuales entonaron furiosas el I will survive y el Consistorio tardó 24 horas en retractarse: "Ha sido un malentendido", explicaron los de Ana Botella. Al final el Orgullo no se mueve del sitio, aunque se discutirá que los espectáculos más ruidosos salgan del centro. De un lado están los que defienden que la fiesta es inseparable del barrio que hace 30 años empezó a luchar por la visibilidad gay. Del otro, quienes creen, como Medio Ambiente, que el asunto se ha ido de las manos (este año duró dos semanas, culminó con una cabalgata con cientos de miles de asistentes y generó 115 toneladas de basura). En el centro de la polémica 40 mayores de 65 años que viven en pisos tutelados en la plaza Vázquez de Mella. "Se ponen muy nerviosos porque pasan tres o cuatro días sin dormir", contó en estas páginas un asistente social. "Los que pueden se marchan, pero no todos, porque viven con la pensión mínima de unos 300 euros al mes".

- 'Money for nothing' (Dire Straits)

. Vivir con 300 euros es austeridad y no las rebajas de los sueldos de los políticos. Aguirre arrancó el mes con "una medida ejemplarizante": bajar un 2% la nómina de 200 altos cargos. Mola, aunque en realidad, la bajada es de un 0,4%, ya que en el último año les subió la paga un 1,63%. Haciendo cuentas, la presidenta, que gana 108.004 euros, reducirá su nómina hasta diciembre en unos 900 euros (o tres pensionistas). El superahorro de la medida supone el 0,01% del presupuesto, es decir, calderilla que no da para nada, Money for nothing, versión from lost to the river (de perdidos al río).

Aguirre animó a los diputados a imitarla. Cualquiera se niega. Madrid, con 418.284 personas en la cola del INEM, es la única comunidad donde creció el paro en junio (lo supimos en julio). Con este panorama, que sus señorías no se bajen el sueldo queda como feo políticamente. La oposición aceptó la rebaja y le propuso a Aguirre que, ya puesta, eliminase los sobresueldos de los viceconsejeros que hacen doblete como diputados. Cobran 6.788 euros por alto cargo, más 1.300 por su trabajo a tiempo parcial en la Asamblea. Miguel Reneses, de IU, sacó la calculadora: "El total del ahorro de la bajada de sueldos de los diputados es de 113.894 euros, y el importe del sobresueldo de los viceconsejeros supone un gasto de 109.200 euros; es decir, nos podríamos ahorrar 223.094 euros. ¿Por qué a la hora de la verdad el PP no quiere acabar con el despilfarro?". Éste le contestó rechazando la enmienda.

- 'Olvídame y pega la vuelta' (Pimpinela).

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Dentro del PP la cantinela fue la de siempre. Es alucinante comprobar cómo cualquier tema de Pimpinela ilustra la relación Aguirre / Gallardón: Algo me pasa contigo, Ahora me toca a mí, Hay amores que matan, Ni contigo ni sin ti, Qué ganas de no volver a verte nunca más y el eterno Olvídame y pega la vuelta. Todos sus temas, menos Yo renuncio, porque aquí nunca renuncia nadie.

En julio la rencilla vino por lo que apareció bajo la calle de Serrano: una vieja conducción hídrica y una cerca de la época de Felipe IV. Las obras para hacer un aparcamiento toparon con la Historia y ésta sirvió de excusa para una nueva bronca. Que si el Ayuntamiento debió haberlo previsto, que si la Comunidad es la que para las obras... etcétera. De momento, la zanja horada la ciudad hasta que las instituciones resuelvan qué hacer además de pelearse. Dado que está en el barrio de Salamanca, la premura es básica.

Más al sur, hay, desde hace décadas, otra herida abierta: la Cañada Real Galiana, donde viven unas 40.000 personas de forma ilegal. Drogas, marginación, niños sin escolarizar, pobreza extrema... El plan es acabar con ella, pero lleva tanto tiempo enquistada que los plazos se calculan en años. Esta diferencia norte-sur se nota incluso en lo que la gente se mete. El día 13 la operación Telecoca desmanteló una red de tráfico de cocaína a domicilio en la Milla de Oro; unos días después, en la Cañada, moría apuñalado un hombre tras una pelea por una pipa de crack. Todo es economía.

- 'Escándalo' (Raphael). De los escándalos del PP madrileño se habrán enterado, aunque hayan estado fuera, porque saltaron a las primeras planas. Por un lado, el caso Gürtel, que va más allá de los trajes de Camps. Cuando el tesorero Bárcenas faroleó con tirar de la manta, Esperanza Aguirre vio el órdago: "Le pido de rodillas que toda la información que tenga sobre mí la haga pública cuanto antes".

Sobre el caso de los espías de la Comunidad de Madrid, Aguirre se limitó a negar la mayor y a decir "hoy no toca" [hablar de eso]. La policía demostró (gracias al sistema de posicionamiento de los móviles) que los agentes del aguirrista Granados siguieron a Prada, el consejero díscolo de la presidenta. "Hacíamos contravigilancia", alegaron los imputados. El problema es que no avisaron a Prada, a sus escoltas o a Interior a quien, por cierto, competen las labores de contravigilancia. También que se dedicaban a vigilar con quién comía Prada y que si había policía cerca, preferían salir de escena. El asunto parecería sacado de Mortadelo y Filemón, si no fuera porque no tiene pizca de gracia. El último imputado es Sergio Gamón, fichaje de Aguirre, marido de una de sus secretarias y amigo personal.

- 'Loser' (Beck). Mientras tanto en el Partido Socialista de Madrid, Tomás Gómez, el secretario general, intentó llamar la atención con un: "Pisamos el acelerador y entramos en campaña, deben conocernos ya". Asumir que a uno no le conocen aunque lleve dos años como cabeza "invisible" de los socialistas madrileños, es como ponerse directamente a cantar I'm a loser, baby (soy un perdedor). Pero, claro, cualquiera compite en un karaoke con una mujer que el día 27 le tararea el himno a Contador por ganar el Tour y el 28 le canta, a la Marilyn, el cumpleaños feliz a Rubalcaba.

- 'Requiem' (Mozart). La canción más triste de julio sonó el día 13 cuando murió Ryan, el bebé de Dalila, fallecida 15 días antes por la gripe A. El director del hospital Gregorio Marañón dijo que fue "un terrorífico error" de una enfermera. Sus compañeras no tardaron en reunir más de mil firmas demandando más personal y más especialización a la Consejería de Sanidad. En Vallecas, el día 25, moría otra niña, María Mercedes, de 12 años, apuñalada por el novio de su tía. La crónica negra, dejó al menos, una buena noticia: la detención del líder de Los Miami. Como en un episodio de Los Soprano, le pillaron camino del cumpleaños de su hijo en su chalé de Navacerrada y sin la pierna ortopédica puesta.

- 'Material Girl' (Madonna). Quienes se quedaron pudieron disfrutar de la nueva calle de Fuencarral, que ya es peatonal y no hay quien la reconozca.

Además, pasaron por la ciudad Jeff Beck, James Taylor, Metallica y Madonna. Se dio una tendencia: apostarse en un alto alrededor de los recintos musicales para escuchar los conciertos gratis. Eso sí que es una medida anticrisis. La picaresca aprieta cuando las entradas para Madonna salen por entre 100 y 400 euros. La chica materialista sudó la camiseta ("esto parece un vídeo de Eva Nasarre a lo bestia", dijo una fan), pero, según el crítico musical, estuvo fría. Y eso que con una sola de las 35.000 entradas vendidas, vive un pensionista 10 días.

Madonna, rodeada de bailarines, en su actuación en el estadio Vicente Calderón.
Madonna, rodeada de bailarines, en su actuación en el estadio Vicente Calderón.LUIS SEVILLANO

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Sobre la firma

Patricia Gosálvez
Escribe en EL PAÍS desde 2003, donde también ha ejercido como subjefa del Lab de nuevas narrativas y la sección de Sociedad. Actualmente forma parte del equipo de Fin de semana. Es máster de EL PAÍS, estudió Periodismo en la Complutense y cine en la universidad de Glasgow. Ha pasado por medios como Efe o la Cadena Ser.

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