Una familia denuncia al Puerta de Hierro por atender mal un parto
Otra familia, que no ha presentado queja, también lamenta el uso del fórceps
El servicio de ginecología y obstetricia del hospital Puerta de Hierro de Madrid, en Majadahonda, se enfrenta a una denuncia por negligencia médica en el parto de una mujer en el que se utilizaron fórceps. El bebé se encuentra en estado crítico.
María José Moreno Chacón y Pedro Rubio Lorenzo, los padres de Daniela, el bebé afectado, acudieron el pasado martes al Juzgado número 2 de Majadahonda para denunciar tanto "las lesiones" sufridas por la mujer como por su hija. Según la denuncia, la pequeña se encuentra "en muerte cerebral".
En la queja, la pareja imputa las lesiones a la "negligente manipulación" de los fórceps. Los padres también protestan porque no se practicara cesárea, tal como solicitaron.
El hospital Puerta de Hierro reconoce que hubo "complicación en el parto expulsivo", según manifestó el gerente del centro, Jorge Gómez. "Se actuó con normalidad y el trato fue el correcto"."Son las ilusiones de nueve meses", dice Pedro Rubio con la mirada pegada al suelo. Su hija Daniela se encuentra en estado de muerte cerebral en el hospital Puerta de Hierro desde que nació, el pasado 18 de julio. Desde ese día, la pequeña permanece en una incubadora del centro, rodeada de tubos.
Las imágenes del bebé que tomó la familia al poco de nacer muestran a una cría con magulladuras en la cabeza, causadas por los fórceps. "Mi niña estaba muy sana antes de nacer. En las ecografías se veía cómo se movía", narra la madre, María José Moreno, que ahora precisa de la atención de un psiquiatra. "Me lo ha puesto el hospital", explica la mujer. Ella permanece ingresada en el hospital, recuperándose del complicado parto. "Estuvieron dos horas poniéndome puntos", justifica la mujer.
María José Moreno se puso de parto a las siete de la mañana del pasado viernes 17 de julio. Iba a dar a luz por primera vez. "Tenía muy poca dilatación, apenas cuatro centímetros, por lo que solicité que me pusieran la anestesia epidural", recuerda la madre. En torno a las doce del mediodía rompió aguas. "La matrona me dijo que a lo mejor tenían que hacerme cesárea", relata. A las seis de la tarde, había dilatado ocho centímetros.
"A partir de entonces, pedí constantemente que me hicieran cesárea", prosigue. "Pero la doctora insistía en que lo mejor era el parto vaginal". Y agrega: "Me cambiaron varias veces de posición, incluso me pusieron a cuatro patas, pero la niña no nacía". Asegura que estuvo atendida en todo momento al menos por una ginecóloga y una matrona. Pasada la medianoche, la ginecóloga decidió sacar a la niña con fórceps. "Al tirar, me levantó la pelvis. La niña tiene la cabeza reventada", asegura la madre. "Nada más salir, a mi hija le pusieron oxígeno. Tenía la cabeza con heridas y moratones", interviene el padre.
El gerente del hospital Puerta de Hierro, Jorge Gómez, asegura que es "normal" que los bebés que nacen con la ayuda de este tipo de instrumental presenten magulladuras y añade que el parto expulsivo duró tres horas.
Los padres explican que sólo han acudido al juzgado "para evitar que vuelva a ocurrirle a alguien lo que nos ha pasado a nosotros". Sólo se quejan del funcionamiento del servicio de obstetricia. "En el resto de los servicios del hospital nos han tratado muy bien y se han puesto a nuestra disposición para todo lo que podamos necesitar", aseguran.
Otra pareja, que pide no ser identificada, planea denunciar al hospital Puerta de Hierro por otro parto, también con fórceps, registrado a comienzos de mes. Aseguran que a consecuencia de ello el bebé sufre una lesión medular que le mantiene ingresado y con respiración asistida. Los padres dicen que el niño recibe también atención fisioterapéutica. "Cuando lo llevemos a otro hospital, previsiblemente el lunes, presentaremos la denuncia", afirman. El gerente del hospital aseguró anoche que desconoce este caso.
