López reafirma el pacto con el PP pero quiere ver si la oferta del PNV es sincera

El sábado pasado parecía que el PNV se había echado al monte con el acto de "desagravio" a la ikurriña en la cumbre del Gorbea, apuntalando así su presidente el perfil más montaraz de su discurso desde que ha sido desalojado del Gobierno vasco en virtud del acuerdo de bases entre socialistas y populares. Pero el mismo lunes, su ejecutiva, presidida por el mismo Íñigo Urkullu, lanzaba una oferta a todos los partidos, preferentemente a los socialistas vascos, de un gran pacto de estabilidad institucional en Euskadi.

¿Ofrecimiento sincero atendiendo a la crisis económica o maniobra táctica para conjurar la moción de censura que pretenden los populares contra la Diputación de Álava y, de paso, abrir fisuras entre socialistas y populares? Esta es la pregunta que desde entonces se hacen en el PSE y en el Gobierno. Y a ella trató de responder ayer el lehendakari, Patxi López, en una entrevista en Onda Cero. Por un lado, ratificando el compromiso con el acuerdo de bases firmado con el PP, que son, recordó, lo que ha permitido "alumbrar un nuevo tiempo en Euskadi". En este sentido, aseguró que mantendrán con "todas las consecuencias el pacto con el PP", firmado el pasado 1 de abril, que expresamente señala que "el Gobierno vasco establecerá un diálogo previo y una negociación con el PP vasco sobre los presupuestos de la comunidad autónoma vasca para garantizar su aprobación".

López apunta que las mociones de censura se ponen "en base a hechos"

Ares invita al PNV que traslade la misma oferta al Congreso

Pero el lehendakari dejó abierta la puerta a explorar una vía de acuerdo con los peneuvistas, si finalmente se confirma que tras la oferta no se esconde una sibilina operación para ponerle entre la espada y la pared y provocar disensiones en su acuerdo con el PP de Antonio Basagoiti. Ayer advirtió de que mirarán "si detrás del anuncio del PNV hay un compromiso de verdad o simplemente tactismo". Pero el acuerdo con los populares también recoge que no se excluyen "otras relaciones y otros posibles acuerdos con el resto de las fuerzas parlamentarias, siempre que los mismos no afecten a los contenidos" del pacto PSE-PP.

Desde Navacerrada, donde el presidente del PP, Mariano Rajoy, clausuraba el campus de verano de FAES, el líder popular lanzó una clara advertencia destinada a atajar cualquier exploración que debilite el pacto con su partido. Sería "dramático", afirmó, que por buscar un acuerdo de estabilidad presupuestaria entre el PSE y el PNV "todo lo que es importante y esencial" en el País Vasco, el cambio político, "quedase en nada".

A la hora de calibrar la sinceridad de las intenciones del PNV, el consejero de Interior, Rodolfo Ares, señaló que sería bueno que el ejercicio de responsabilidad que ofrece ahora el partido de Urkullu -el mismo que tuvieron los socialistas cuando estaban en la oposición, recordó- se extendiera más allá de las instituciones del País vasco (Gobierno, diputaciones y ayuntamientos).

Afirmó que el PNV tendrá "la oportunidad de decir con absoluta claridad que está dispuesto a negociar los presupuestos de Euskadi" y además, añadió, "sería deseable" que también mantuviera esa actitud "de colaboración con el Gobierno de España", de manera que el Grupo Vasco facilitara en el Congreso la aprobación de las cuentas del Estado. Ares subrayó que "si el PNV tiene de verdad una voluntad expresa de contribuir a afrontar la crisis y solucionar los problemas de los ciudadanos vascos, esa predisposición política debería llevarse a cabo en todas las instituciones", ya que también desde el Gobierno central se desarrollan medidas para hacer frente a la crisis. Fuentes de la dirección peneuvista apuntaron que ese planteamiento sería más caro para el PSOE.

López no se complicó la vida ayer con la cuestión de la posible moción de censura en Álava. Preguntado sobre la cuestión, el lehendakari vinculó el apoyo del PSE a los populares para desalojar a Xabier Agirre al comportamiento institucional de los nacionalistas. Tras asegurar que las mociones de censura se ponen "en base a la realidad de los hechos", advirtió de que "tampoco vamos a caer en el error de que se juegue a la colaboración desde la Diputación de Álava y a la oposición frontal desde la de Vizcaya", ya que "todo forma parte de una estrategia".