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Reportaje:

La vela de miles de bilbaínos

Los ciudadanos celebran el cumpleaños de la villa en una noche de ocio cultural

Bilbao adelantó ayer su 709º cumpleaños -oficialmente los cumple mañana- echándose a la calle. Fue una tarde-noche de ocio cultural, en la que miles de bilbaínos pudieron redescubrir lugares que habitualmente tienen a su alcance, pero que les pasan desapercibidos. La ciudad se quedó en vela durante la noche más blanca para disfrutar de más de 30 actividades que se desarrollaron en una docena de espacios dentro de la programación Gau Zuria-Noche Blanca.

Museos, centros artísticos, edificios significativos, la Universidad de Deusto o la Biblioteca de Bidebarrieta fueron algunos de los escenarios que albergaron música, danza, literatura, teatro, diseño, videocreación y visitas extraordinarias. Y todo desde las ocho y media de la tarde hasta las dos de la madrugada.

La Biblioteca de Bidebarrieta colgó el cartel de lleno con Azkuna y López

Los ciudadanos se fueron animando a medida que se acercaba la noche, en especial en las actividades concentradas en el Casco Viejo, como en la Catedral Santiago, donde la Orquesta Sinfónica de Acordeones de Bilbao dejó el aforo pequeño. "Qué bien suena", comentaban dos señoras acompañando los sones. "Cuando vi el programa, tenía claro que estos conciertos no me los iba a perder", decía Aurora M., apoyada en los barrotes de la verja porque se había quedado sin silla y sin perder de vista los asientos por si alguno quedaba libre.

La Biblioteca de Bidebarrieta fue otro de los escenarios que colgó el cartel de lleno gracias a la presencia, entre otros del alcalde, Iñaki Azkuna, y el lehendakari, Patxi López, quienes acudieron a leer fragmentos de sus obras preferidas. López, cuya presencia no esperaban alguno de los presentes, leyó textos de Mi vida adrede, de Mario Benedetti. Acabó con la pieza La realidad, que recuerda que "hasta en la guerra hay poesía".

El programa incluía la presencia de figuras de renombre en el panorama nacional, como la cantante Concha Buika, quien fue uno de los grandes momentos de la jornada.

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Otra actuación estelar fue el espectáculo aéreo creado por Valerio Festi, conocido en Bilbao por el Carnaval Veneciano, que presentó hace unos años en la villa. La fachada del Arriaga acogió la exhibición en la hora punta, las diez y media de la noche.

Andrés P. sale corriendo de la biblioteca Bidebarrieta tras escuchar al alcalde. ¿Dónde va? "Al Museo de Bellas Artes. Tiene que ser divertido lo del paseo nocturno, ¿no?". Seguro que sí.

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