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La temporada de baño se abre con el agua limpia y pocas medusas

El calor aprieta y las playas se llenan con los primeros bañistas que buscan sol y mar. El litoral catalán está preparado a medias: el agua está limpia y hay pocas medusas, pero la arena de algunas playas necesita mejorar. Éste es el resultado del análisis que la Agencia Catalana del Agua (ACA) realizó entre el 27 de mayo y el 2 de junio de este año, cuyos datos fueron hechos públicos ayer.

El 99,6% de las aguas analizadas muestran una calidad sanitaria excelente: sólo un punto de control, en la playa de las rocas de Calella (Maresme), se situaba en el segundo nivel de calidad.

La arena, sin embargo, está lejos de este resultado: el 5% se considera excelente, el 62% buena, el 25% de calidad moderada y el 3% deficiente. Estas cifras se deben a que algunas playas no han sido arregladas tras los temporales del invierno, en el que han estado sometidas al dictado de la naturaleza.

La ACA presentó ayer su campaña de verano, que, con 3,5 millones de euros de presupuesto, se centra en dos frentes: mantener la limpieza de las aguas y alejar a las medusas de las playas. Para el primer objetivo, 44 embarcaciones analizarán semanalmente el estado del agua y navegarán por el litoral catalán recogiendo residuos sólidos e hidrocarburos.

Toneladas de basura

El año pasado se recogieron 51 toneladas de desperdicios, una cifra el 17% inferior a la de 2007. "Esto nos indica una muy buena conducta cívica de los ciudadanos. Nadie tira la basura al mar", celebró el consejero de Medio Ambiente de la Generalitat, Francesc Baltasar.

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Para evitar las dolorosas picadas de medusa, los esfuerzos de la ACA se basarán en alejar lo máximo posible estas especies de las playas: un satélite permitirá avistar grandes bancos de medusas y las cofradías de pescadores colaborarán con la Generalitat para detectar la presencia de estos animales. "La misión no es exterminar masivamente a las medusas, porque esto sería un atentado ecológico y desempeñan un papel fundamental en el ecosistema marino", razonó Baltasar. El consejero predijo "un verano tranquilo" en este aspecto: por el momento, la presencia de medusas en las playas es reducida y se trata de especies poco urticantes.

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