Chamizo exige medidas inmediatas para los 95 menores chabolistas

Siguen pasando los días sin que los niños vayan al colegio y pueden perder el curso. Hasta 95 menores llevan casi dos meses sin tocar un libro y las clases se acaban en apenas cinco semanas. "El tiempo juega en nuestra contra, el curso se acaba ya y tienen que ser evaluados", comentó ayer el defensor del pueblo andaluz, José Chamizo. Se refiere a los chicos del Polígono Sur de Sevilla que viven desde el pasado 29 de marzo en chabolas bajo el puente de hierro de San Juan de Aznalfarache y que tuvieron que abandonar sus casas llevados por sus padres. Escapan porque tienen miedo a ser disparados por la familia de un menor que murió por el impacto de una bala perdida en un tiroteo en el que podrían estar implicados. No pueden ni acercarse a recoger sus cuadernos. "No digo ni cómo, ni dónde lo tienen que hacer, pero tienen que estar escolarizados ya".

Que no consigan pasar de curso sería un problema para la matrícula de 2010

"Yo quiero ir al cole, aquí me aburro, por lo menos tener algo para escribir", comentan algunos de los niños que pasan el día entre cristales y pinchos, sin luz y sin agua. Según el comisionado para el Polígono Sur, Jesús Maeztu, son 70 niños los que están en edad de escolarización obligatoria. "Su situación se debe a una causa de fuerza mayor, no podrán volver a sus centros de origen en el barrio". Educación ya ofreció a finales de abril autobuses para acercar a los niños a cualquier centro educativo, pero la propuesta aún espera la aprobación del comisionado, que lo estima "peligroso". La Fiscalía de menores está informada pero no iniciará ninguna acción penal porque ya están implicadas las administraciones.

El pasado 11 de mayo, la Subdelegación de Gobierno, el Ejecutivo autonómico y el Ayuntamiento de Sevilla se coordinaron para tomar soluciones conjuntas al problema. No sólo para solventar el caso de los niños absentistas, también para reubicar a las 40 familias que han huido del Polígono Sur, más de 300 personas. La semana pasada no se han reunido y la próxima cita está prevista para principios de la viene. Pasa el tiempo.

Que no promocionen de curso o no formalicen la matrícula para el 2010-2011 es también un problema para el Instituto Polígono Sur, adscrito al colegio Andalucía, de donde son la mayoría de los niños. Si los chicos no acaban sexto, no habrá alumnos suficientes para formar los mismos grupos que ha habido en este curso. Educación ha querido matizar que los chicos son absentistas, pero mantienen su plaza escolar, así que están escolarizados. "Aunque el colegio se ha quedado prácticamente vacío", comentan algunos vecinos.

También están vacías las 40 casas que los huidos han abandonado y que la policía ha precintado. Estas viviendas fueron adquiridas en el año 2004 por los chabolistas que vivían anteriormente en el asentamiento de Los Bermejales. El Ayuntamiento les dio 42.000 euros en una bolsa para que buscaran residencia, sin medidas adjuntas de integración. Casi todos se trasladaron a un deprimido barrio del Polígono Sur y algunas de estas casas han terminado ocupadas ilegalmente. "Lo que se debe hacer es una reubicación heterogénea e individualizada, para que se integren", recomienda Maeztu. Ahora, los huidos que quieran volver a sus casas deben aportar hasta el día 4 de junio en Vivienda algo que certifique que residían allí.

Esta es una de las medidas tomadas en la reunión de las tres administraciones. Otra fue destrozar las chabolas que había debajo del puente de hierro en las que desde hace más de seis años vivían once familias ajenas al problema que se les avecinaba. La policía ha detenido a seis participantes en la reyerta que ocasionó el disparo; y el padre y tres tíos del fallecido están en libertad con cargos. Sigue la investigación, igual que sigue pasando el tiempo sin que los niños vayan al colegio.