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Rajoy tacha de "ladrillazo" la supresión de la deducción por compra de piso

El presidente del Partido Popular (PP), Mariano Rajoy, tachó ayer de "ladrillazo" la eliminación de la deducción fiscal por la compra de vivienda a partir de 2011, y aseguró que el presidente del Ejecutivo, José Luis Rodríguez Zapatero, "no convence a nadie" ya que "tenía la confianza de mucha gente y la ha dilapidado". Rajoy hizo esta afirmación en un acto de Nuevas Generaciones del PP en Madrid, en el que estuvo acompañado por el número uno a las europeas, Jaime Mayor Oreja.

"Zapatero cree que todo se arregla dando billetes", dijo el presidente del PP, cuando "lo más importante es el empleo, la educación, la vivienda, la ayuda a los emprendedores, Internet y las nuevas tecnologías". Criticó que las últimas medidas anunciadas por el Gobierno esté basadas "en el corto plazo, en la media hora siguiente, en la improvisación y en salir del paso".

El presidente del PP pidió "una reforma laboral que apueste por una contratación indefinida" en lugar de impulsar medidas como la del cheque de 400 euros, "la colosal chapuza de Zapatero". Advirtió de que "la educación no es un problema de ordenadores" sino de "calidad, esfuerzo y trabajo", y rechazó que las niñas de 16 años puedan abortar sin el consentimiento de sus padres, que "son quienes más les quieren en esta vida y más les podrían ayudar" en esa situación.

Ante los gritos de "¡presidente, presidente!" de un centenar de jóvenes, Rajoy insistió en "defender los intereses de los españoles" en Europa. "Algunos se creen que a Europa se va a repartir abrazos y hacerse el simpático", dijo el líder de la oposición, que defendió las políticas de Francia o Alemania que apuestan por "la libertad y la estabilidad económica".

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