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Las quejas al Ararteko por las ayudas sociales públicas se disparan

La crisis incrementa los conflictos entre los ciudadanos y la administración

La crisis económica está sometiendo a una dura prueba al sistema de ayuda social de Euskadi, la primera comunidad que implantó la renta básica. Las quejas de los ciudadanos al Ararteko por las ayudas sociales que proporcionan las instituciones se dispararon el año pasado. Un aumento "espectacular" debido a la crudeza de la crisis, según recalcó ayer el ararteko, Iñigo Lamarca, durante la presentación del informe de actividad de esta institución correspondiente al año 2008.

El número de quejas relacionadas con las políticas sociales (especialmente las que se refieren a las prestaciones económicas) ascendió a 157, lo que representa un aumento del 36,5% y un 12,38% del total de las recibidas por el Defensor vasco del Pueblo. Esto le coloca en el segundo lugar de todas las áreas de actuación. La crisis económica ha conllevado un aumento de los ciudadanos que solicitan ayudas públicas y esto, a su vez, ha provocado el incremento de los conflictos por desavenencias con las administraciones públicas. Y lo previsible es que este año se produzca una segunda oleada, cuando las personas que ahora se encuentran en paro y cobrando el subsidio por desempleo llamen a las puertas de las instituciones en demanda de más ayudas económicas. "El aumento de estas quejas va a resultar, desgraciadamente, inevitable". A eso hay que añadir que el Defensor del Pueblo también ha aumentado sus actuaciones de oficio en este campo.

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El informe, que fue entregado a la presidenta del Parlamento vasco, Arantza Quiroga, recoge un total de 1.696 quejas, de las que 1.268 fueron admitidas a trámite, lo que supone un aumento del 11,42% con relación a a 2007. Los expedientes de oficio, que el Ararteko abre cuando observa algún indicio de actuaciones incorrectas en las administraciones o cuando considera que algo merece su atención, se elevaron a 389 frente a los 62 del año anterior. Lamarca puntualizó que este incremento no se debe en exclusiva a que se hayan apreciado más indicios de irregularidad en las administraciones, sino que la institución ha realizado una mayor labor de seguimiento de asuntos que tenía pendientes.

El sector de obras públicas es el que más quejas concita (158), seguido de las políticas sociales (157), Interior (141) y función pública (128).

El grado de colaboración de las administraciones con las peticiones que dirige el Defensor del Pueblo para resolver las quejas ciudadanas ha mejorado. En 2008 no tuvo que recurrir a ningún tipo de apercibimiento, que es una reclamación que se envía a las administraciones tras un requerimiento sin respuesta. Sin embargo, sí han sido "demasiados" los requerimientos que ha dirigido a diferentes administraciones por no responder a tiempo a las peticiones de información. Por ejemplo, el Departamento de Educación del Gobierno no contestó en el plazo establecido al 45% de las peticiones enviadas. Y a casi un 40% de los ayuntamientos guipuzcoanos se les mandó requerimientos en el 100% de las peticiones porque no respondieron en plazo.

Entre sus recomendaciones, el Ararteko insta a las instituciones a crear cementerios musulmanes que permitan, a quienes profesan esta religión, ser enterrados con sus ritos. En la actualidad, sólo Bilbao dispone de un camposanto para los quienes practican la fe islámica.

El informe también exige al Departamento de Vivienda una respuesta "urgente y eficaz" de las administraciones públicas para subsanar los problemas de accesibilidad que se ha registrado en algunos pisos de promoción pública destinados a personas con discapacidades.

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