El Gobierno intenta ganar popularidad con un plan para apoyar a las 'pymes'

Que la crisis está aún lejos de disiparse queda en evidencia con la noticia de que el Gobierno alemán estudia intervenir en el mercado de seguros crediticios. El Ejecutivo de Berlín prepara un plan de ayudas financieras al sector, en apoyo de las pequeñas y medianas empresas incapaces de acceder a los seguros de las compañías privadas. La crisis financiera y crediticia ha provocado un considerable retroceso en el número y en el volumen de seguros contratados en Alemania. Las aseguradoras temen la quiebra de las empresas y se niegan a asumir el riesgo de impago, lo que podría llevar al anquilosamiento de los créditos y a una quiebra masiva de compañías. El volumen de seguros de crédito ha caído en 23.000 millones de euros este año, un 9%.

Según el diario Handelsblatt, el Gobierno quiere evitar un efecto dominó en las pequeñas y medianas empresas alemanas. Una empresa insolvente puede llevar a la ruina a su empresa acreedora. A su vez, la quiebra de ésta podría causar efectos similares en sus propios acreedores, lo que podría desatar un terremoto en el panorama empresarial alemán y un descalabro de la llamada "economía real".

Según se desprende de una carta del secretario de Estado de Economía, Walther Otremba, filtrada a los medios de comunicación, el Gobierno mantiene negociaciones con las aseguradoras, que no están cubriendo la fuerte demanda de pólizas para créditos empresariales. Es precisamente el miedo a las quiebras lo que lleva a las pequeñas empresas a solicitar más seguros que nunca, el mismo miedo que lleva a las aseguradoras a negar muchas pólizas. Las más afectadas son las empresas pequeñas, que se están quedando sin cobertura para sus negocios.

Las opciones para lograr el objetivo son varias. El Gobierno podría actuar como reaseguradora y asumir algunos riesgos de las pólizas. También se estudia que el banco público de crédito KfW ofrezca seguros propios. La tercera variante contempla que se recurra a los 100.000 millones de euros del fondo creado en enero por el Gobierno para apoyar a los bancos y cajas de ahorros alemanes.

Unas 40.000 empresas alemanas tienen hoy pólizas de crédito, por un valor total de 290.000 millones de euros. La parte del león se la llevan tres grandes aseguradoras, que cubren el 90% del mercado. Entre ellas cunde ahora la desconfianza. Fuentes de la patronal del sector se han mostrado de acuerdo con la intervención del Gobierno, "siempre que no distorsione la competencia".

Alemania seguiría así los pasos del Gobierno francés, que ofreció el mes pasado garantías por 5.000 millones de euros a las compañías incapaces de contratar un seguro. También Reino Unido concedió ayudas por 300.000 millones de libras, unos 337.650 millones de euros, al mercado británico de seguros crediticios.