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Washington no perseguirá los casos de tortura de la CIA

Yolanda Monge

Aquellos que utilizaron la tortura como método de interrogatorio en la lucha contra Al Qaeda durante los años de Gobierno de George W. Bush no serán perseguidos por la justicia. Con esta decisión, y la publicación de una serie de memorandos que revelan el razonamiento legal empleado para justificar tácticas que se equiparan con la tortura entre 2002 y 2005 en las prisiones secretas que EE UU tenía en el exterior, Barack Obama dio ayer un paso más para cerrar lo que consideró "un oscuro y doloroso capítulo" de la historia de su país. Según declaraciones del presidente de Estados Unidos, las técnicas de tortura como la simulación de asfixia "minaron nuestra autoridad moral y no hicieron a Estados Unidos más seguro".

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Para Obama, quienes realizaron estos interrogatorios "actuaron de buena fe basándose en las opiniones del Departamento de Justicia", por lo que no serán sujetos de ninguna acción legal.

El debate interno hasta llegar a esta decisión ha sido intenso, según fuentes de la Casa Blanca. "Es hora de reflexionar y no de castigar", reiteró el presidente en un comunicado y en una carta enviada a los agentes de la CIA, en la que aseguraba que la nación debía proteger sus identidades "tanto como ellos protegen nuestra seguridad". "Sería injusto procesar a los entregados hombres y mujeres que trabajaban para proteger América por una conducta que fue autorizada por el Departamento de Justicia", manifestó el fiscal general del Estado, Eric Holder.

Leon Panneta, director de la CIA, escribió en un mensaje a sus empleados: "La CIA responde según el deber lo requiere".

El presidente declaró haber autorizado la publicación de los documentos para evitar "una descripción imprecisa de lo que ocurrió", lo que, en su opinión, "alentaría presunciones erróneas e inflamatorias de las medidas adoptadas por EE UU". Pero insistió en que en momentos de grandes desafíos y falta de unidad, "no se gana nada al invertir tiempo y energía en asignar culpas por lo que pasó".

Los memorandos redactados por la Oficina de Consejo Legal del Departamento de Justicia entre 2002 y 2005 se han hecho públicos tras una demanda interpuesta y ganada por la Unión Americana de Libertades Civiles (ACLU, siglas en inglés). En esos informes -cuatro en total- los abogados de Bush dieron el visto bueno a una serie de métodos de interrogatorio que se usaron contra 28 sospechosos de terrorismo.

Las tácticas empleadas van desde el tristemente método conocido como waterboarding o asfixia simulada hasta usar un collar de plástico para mantener a los detenidos sujetos por el cuello a los muros de las celdas de interrogatorio. También se permitía usar insectos en cajas en las que se introducía a los interrogados, así como las técnicas de privación del sueño.

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Sobre la firma

Yolanda Monge
Desde 1998, ha contado para EL PAÍS, desde la redacción de Internacional en Madrid o sobre el terreno como enviada especial, algunos de los acontecimientos que fueron primera plana en el mundo, ya fuera la guerra de los Balcanes o la invasión norteamericana de Irak, entre otros. En la actualidad, es corresponsal en Washington.

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