"Ahora sólo podemos hacer chapuzas"
Alonso da por hecho que el R29 no tendrá una mejora sustancial hasta el GP de España, el 10 de mayo - Briatore estima que los nuevos difusores costarán 10 millones de euros
La respuesta de las escuderías a la decisión del pasado miércoles de la Corte de Apelación de la Federación Internacional Automovilística (FIA) no se ha hecho esperar. La sentencia que legaliza de forma definitiva los dobles difusores de los coches de Brawn, Williams y Toyota ha supuesto una reacción fulminante de las demás. Ayer, Flavio Briatore, director de Renault, evaluaba en unos 10 millones de euros la inversión que deberán realizar en su equipo para ser competitivos frente a los que ahora logran las pole positions y ganan las carreras. "Una incongruencia si tenemos en cuenta que la FIA pretende reducir los presupuestos anuales hasta 34 millones en 2010", matizó.
Aunque varias marcas tienen ya preparados algunos difusores modificados para competir en el Gran Premio de China, el próximo domingo en Shanghai, lo cierto es que deberán transcurrir varias carreras hasta que los dobles difusores puedan ser incorporados a sus monoplazas. "No es cuestión de coger una pieza, cambiarla y ya está. Ni mucho menos. En la mayoría de los casos se requerirán cambios muy sustanciales en el diseño de la aerodinámica de los coches, en las suspensiones delanteras y traseras y en los pontones laterales para que el difusor adquiera la efectividad que tiene en los Brawn", indicó ayer Fernando Alonso; "ahora sólo podemos hacer chapuzas. En cada carrera hemos ido mejorando el coche y aquí seguiremos haciéndolo, Hay nuevas piezas aerodinámicas y mecánicas preparadas. Pero podemos mejorar una o dos décimas de segundo [por vuelta]. Las tres restantes no llegarán hasta Montmeló [el Gran Premio de España], dentro de tres carreras, el 10 de mayo".
El director de Renault: "En cuatro carreras ya no tendremos nada que hacer"
Felipe Massa: "Siento vergüenza de tener un campeonato tan desorganizado"
La polémica, sin embargo, va mucho más lejos. Son muchos los que creen que la FIA está intentando desestabilizar a la FOTA (Asociación de Equipos de F-1) a través de decisiones políticas como la de la Corte de Apelación. "Quiero pensar que Apelación ha actuado honradamente y que la sentencia responde a criterios sólo deportivos", reflexionó Briatore; "porque no puedo imaginar que esta sentencia se haya dictado con la única intención de dividir a los equipos. Sería todo demasiado grave".
La insinuación del magnate italiano no es superflua. Ni mucho menos. Entre los directores de las escuderías esta tesis va adquiriendo consistencia, hasta el punto de que cada vez está más en cuestión el futuro de Max Mosley al frente de la FIA. Su sustituto podría ser Jean Todt, ex director de Ferrari.
Sin embargo, los equipos no tiran la toalla. "Estamos trabajando a fondo para hacer en cuatro semanas el trabajo que los demás han realizado en seis meses. Es muy difícil", esgrime Norbert Haugh, responsable de Mercedes en McLaren. Red Bull ha dejado en su base a Adrian Newey para adaptar el difusor que Charlie Whiting [el responsable de hacer cumplir las reglas de la FIA] les dijo que era ilegal cuando estaban diseñando precisamente su coche para 2009. En París, Red Bull apareció con este difusor ante la Corte de Apelación para demostrar que a ellos se les negó lo que se le permitió a Ross Brawn. En Ferrari insisten en que necesitan saber con exactitud los motivos por los que se han legalizado los dobles difusores para saber a qué atenerse.
Sin embargo, Briatore fue algo más lejos que todos y afirmó que el título ya está decidido. "Dentro de cuatro carreras, cuando Button tenga 60 puntos y Barrichello 50 [Jenson y Rubens, los pilotos de Brawn], los demás no tendremos ninguna posibilidad y el campeonato habrá perdido todo su interés", apuntó; "es imposible recuperar la distancia que nos separa de los equipos que ahora ganan las carreras. Nuestro disgusto proviene de que todo esto debía haberse aclarado antes de comenzar el Mundial. No puede ser que en un deporte en el que se invierte tanto dinero se inicie sin las reglas clarificadas".
También Felipe Massa, piloto de Ferrari, mostró su desolación por lo que está ocurriendo. "Siento vergüenza de tener un campeonato tan desorganizado", subrayó el brasileño; "no son sólo detalles, es todo. Primero, se intentó cambiar la clasificación y dar el título según las victorias conseguidas. Y ahora es como si hubiera tres categorías de coches en el mismo campeonato por culpa de la poca claridad en la reglamentación. Es todo muy amargo. Parece que se está pensando más en términos políticos que deportivos".
Dennis creará un deportivo
Ron Dennis, el histórico director de la escudería McLaren, comunicó ayer en una conferencia de prensa en Woking que se desvincula definitivamente de la F-1. Dennis pasará ahora a ocupar el cargo de director ejecutivo de McLaren Automotive, cuya finalidad es lanzar un deportivo de calle fabricado completamente por la firma británica a partir de 2011. "La compañía tendrá entidad propia porque supondrá una inversión de 250 millones de libras (282,65 millones de euros) y la creación de 800 empleos", advirtió Dennis.
Con la despedida de Dennis, toda la responsabilidad del equipo de F-1 y de McLaren Racing quedará en manos de Martin Whitmarsh, que ya tomó el mando de la escudería en enero de este mismo año. "Nadie me ha impulsado a tomar esta decisión. Es algo mío y no sé si a [Max] Mosley o a [Bernie] Ecclestone les gustará. No me importa", añadió Dennis.
Ron Dennis lleva 42 años en el mundo de la competición automovilística. En 1980 se hizo con el equipo McLaren y desde entonces ha ganado siete títulos mundiales de constructores y diez de pilotos.
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