El PNV recupera su discurso más soberanista en vísperas del Aberri Eguna

El PNV comenzó ayer a calentar motores para la celebración del Aberri Eguna (el Día de la Patria Vasca), que reunirá el domingo en Bilbao a los militantes y simpatizantes del partido, con la versión más esencialista de su discurso político. Después de una campaña electoral en la que el PNV aparcó sus planteamientos más soberanistas y exhibió su pragmatismo y capacidad de gestión, el presidente de la organización vizcaína, Andoni Ortuzar, aseguró que el único límite para la nación vasca, para la de los "siete territorios", es "la libre determinación de los ciudadanos". Ortuzar presentó los actos del domingo junto con el también miembro de la ejecutiva nacional Joseba Aurrekoetxea.

"Nuestro único límite lo establece la voluntad de los ciudadanos vascos"

Por vez primera en los 30 años de democracia, el PNV llega además a su mayor fiesta anual a punto de pasar a la oposición. Ortuzar explicó bajo la carpa instalada en la Plaza Nueva de Bilbao que su partido siempre ha asociado la patria vasca a la libertad. "Una patria libre de ataduras externas y de violencias terroristas, libre para labrar su destino", señaló, para a continuación garantizar que sus hombres y mujeres mantendrán ese compromiso estén "en el Gobierno o en la oposición".

En un discurso de transición hacia un papel que el PNV no ha realizado jamás en la Cámara de Vitoria, Ortuzar quiso dejar claro que, pese a no tener la batuta de mando durante los próximos cuatro años, el camino hacia la "patria vasca" que ha trazado el partido en esa dirección "no admitirá retrocesos". "Formamos entre todos una nación y nuestro único límite lo establece la voluntad de los ciudadanos vascos, su libre determinación, su capacidad para decidir entre todos el futuro", enfatizó.

Ortuzar aprovechó la circunstancia de que este Aberri Eguna se celebra entre dos elecciones, las autónomicas del pasado 1 de marzo y las europeas del próximo 7 de junio, para darle a la territorialidad un tratamiento más reivindicativo que simbólico. "Vamos a trabajar para promover el cambio político y social que permita a los navarros ejercer su vasquidad libremente y para que Iparralde [el País Vasco francés] consiga un reconocimiento institucional como entidad política y administrativa", explicó.

El PNV ha convocado también a sus afiliados y simpatizantes a subir el sábado a los mayores montes vascos y plantar allí la ikurriña como acto de reafirmación nacionalista.

Ortuzar aprovechó para analizar la actualidad política y volvió a criticar con dureza la actitud de socialistas y populares, a quienes acusó de hacer un frente contra su formación. "No es el PNV el que está haciendo una política frentista. Es el PNV el que está siendo víctima de una política frentista", sostuvo, poniendo como ejemplo la reciente elección de la Mesa del Parlamento, la próxima del socialista Patxi López como lehendakari o los "tantanes de guerra que suenan en la Diputación de Álava" donde los dos partidos constitucionalistas podrían censurar al actual diputado general, el peneuvista Xabier Agirre.

También puso en duda la capacidad del nuevo ministro de Política Territorial, Manuel Chaves, para completar los estatutos. "El Gobierno central ha mutilado y recortado las competencias", así que "tenemos que ser muy escépticos ante este tipo de anuncios, porque la credibilidad del Gobierno Zapatero en este campo está bajo mínimos".

El portavoz del PSE en el Parlamento, José Antonio Pastor, le replicó después en declaraciones a Europa Press que "da la impresión de que el PNV ha decidido instalarse en un dicurso más nacionalista todavía y que no ha aprendido ninguna lección de las elecciones autonómicas".

[El presidente del PNV, Iñigo Urkullu, cree que se van a abrir "nuevos caminos para la paz" en Euskadi en 2011. En un artículo escrito en su blog, Urkullu vuelve a sugerir que Batasuna y el PSE-EE están teniendo nuevos contactos].