Cajas, una solución

Es ya un clamor de los españoles para que la situación de las cajas de ahorro no siga como hasta ahora, sin control alguno del Banco de España, bajo el dominio de los dos grandes partidos, Partido Popular y el PSOE, que es abrumador y de hecho las fagocitan. El 90% de los beneficios se lo reparten los dos partidos mayoritarios, y el 10% restante los distribuyen entre los partidos minoritarios y los sindicatos.

El uso de los beneficios no distribuidos lo determina el partido correspondiente en función de sus intereses: valga como ejemplo Caja Madrid que, por imposición de Esperanza Aguirre, compró un importante porcentaje de las acciones de Iberia, a un precio por encima del mercado. Por si no fuera suficiente, se puede recordar la vergonzosa batalla entre Esperanza Aguirre y Alberto Ruiz-Gallardón en defensa de sus intereses.

Aprovechando que bastantes de ellas tendrán que ser reflotadas, bien uniéndose unas con otras o por el Fondo de Garantía de los bancos, creo, ha llegado el momento de que Fernández Ordóñez y Solbes inicien el cambio de estatutos para que queden sometidas al control del Banco de España manteniendo su actual función dedicando los beneficios a invertir en las necesidades de las comunidades y ayuntamientos.