Los arrestos de menores inmigrantes tutelados suman ya 24 en 10 días

Con los últimos, van ya 24 arrestos en diez días. La Ertzaintza detuvo en la madrugada de ayer a otros siete menores magrebíes tutelados por la Diputación de Guipúzcoa, acusados de robar y causar daños en varias caravanas en Urnieta. La decena de menores fugados del centro de Deba suele estar implicada en estos robos a autocaravanas, comercios y transeúntes -suman ocho robos en los últimos días, dos de ellos con violencia-.

Los jóvenes rechazan volver al citado centro, después de haber denunciado malos tratos y abandono ante la justicia. SOS Racismo y varios educadores guipuzcoanos aseguran que el de Deba es un centro disuasivo, en el que se intenta obligar a los menores considerados "irrecuperables" a irse de Guipúzcoa. Los supuestos malos tratos están siendo investigados por la Fiscalía de Menores y el Juzgado de Instrucción número uno de San Sebastián. La diputada de Política Social, Maite Etxaniz, respondió el pasado miércoles que "Guipúzcoa no puede atender a quien no quiere ser atendido" y añadió ante las Juntas Generales que "a mayor cumplimiento de la ley, mayor era la llegada de menores".

Los fugados del centro de Deba suelen participar en estos robos

El ente foral asegura que no puede hacer nada para impedir que los menores entren y salgan del centro. Mientras tanto, la decena de jóvenes fugada del mismo, entre los cuales varios están enganchados al disolvente, sigue deambulando por las calles de Guipúzcoa.

Los últimos detenidos, de 11 a 17 años, tres de ellos con numerosos antecedentes, fueron encontrados alrededor de las 3.30 de la madrugada en una caravana. También están acusados de causar desperfectos a otras cinco. Cada vez que estos menores son detenidos, son puestos bajo la tutela de la Diputación, que les devuelve al centro de Deba. El ente foral plantea como solución la repatriación de los que "han agotado las posibilidades ofrecidas, tanto educativas como de inserción".