Gobierno y Generalitat negocian al alza la cifra de la financiación

Hay partido. Las negociaciones para cambiar el sistema de financiación de la Generalitat continúan adelante pese al bache de la semana pasada al desvelar el Ejecutivo catalán la cifra que le ofrece el Gobierno y que el tripartito rechaza por insuficiente. Los 1.200 millones de euros adicionales que propone el Gobierno central para 2009 son ya una cifra "vieja", según el tripartito, y en los últimos días las conversaciones, a todos los niveles, han continuado para mejorar la oferta. No hay pacto, recordó ayer el presidente de la Generalitat, José Montilla, quien sin embargo aseguró que seguirá negociando pese a la petición de sus socios de ERC de interrumpir las conversaciones si no se llega al pacto en dos semanas.

El Gobierno ha recibido con desagrado que la Generalitat revelara las cifras. El presidente, José Luis Rodríguez Zapatero, incluso la rechazó el viernes por "interesada" y criticó la "filtración". Estas palabras multiplicaron el enfado del Gobierno catalán, ya bastante molesto con la falta de acuerdo financiero siete meses después de expirar el plazo fijado por el Estatuto. El consejero de Economía, Antoni Castells, exteriorizó ayer el enfado y replicó a Zapatero que el de la Generalitat es un "Gobierno serio". "No nos dedicamos a inventar cifras para divertirnos", remachó para dejar claro que la cifra desvelada por la Generalitat es cierta.

Pero más allá de la disputa pública, las negociaciones continúan en los despachos. El Departamento de Presidencia de la Generalitat confirma que Zapatero y Montilla se mantienen en contacto, que las conversaciones han seguido los últimos días y en los partidos que forman el Gobierno catalán se califican de "fluidas" las relaciones entre ambos ejecutivos. "Estamos en un momento en que los contactos son muy intensos", explican fuentes del Departamento de Economía. "No deben de ir tan mal las cosas para que, pese a todo, Montilla y Zapatero continúen en contacto", sostiene un diputado del PSC en el Congreso.

No hay modelo

Una cosa son los números y otra el modelo, algo que para la Generalitat es tanto o más importante que la cifra. Y éste "ahora mismo sigue sin cumplir lo que dice el Estatuto", recordaba ayer un alto cargo del Gobierno catalán. El diseño de los cuatro fondos que ha puesto Zapatero encima de la mesa no garantiza que las comunidades con más renta tengan más recursos por habitante que las otras. Cataluña acepta que esta situación se dé al inicio del periodo, para que ninguna autonomía salga perdiendo en términos absolutos, pero no que se perpetúe el vigente statu quo.

Por su parte, el secretario general adjunto de Convergència, Felip Puig, cree que la oferta de financiación autonómica para Cataluña no tendría que bajar de los 3.500 millones de euros el primer año, para llegar a los 5.000 millones y algo el tercer año de aplicación. Montilla descalificó las aspiraciones de Puig. "CiU ya ha dado cinco o seis cifras y ha cambiado de modelo", dijo antes de pedir a los nacionalistas que estén junto al Gobierno en la negociación.