China dicta dos penas de muerte por la leche que mató a seis bebés
Los tribunales chinos condenaron ayer a muerte a dos hombres y a cadena perpetua a la ex presidenta de Sanlu, uno de los mayores grupos de lácteos del país, por su papel en el escándalo de la leche adulterada, que provocó la muerte al menos de seis bebés. El caso salió a la luz en septiembre. Los jueces dictaminaron que los acusados fabricaron o vendieron productos a los que se había añadido melamina para incrementar de forma ficticia el nivel de proteínas. El químico tóxico mezclado con la leche aguada produjo piedras en los riñones y otras dolencias a más de 290.000 niños.
Los jueces sentenciaron a Zhang Yujun, de 40 años, a la pena máxima por fabricar más de 700 toneladas de "polvo proteínico" con melamina, y vender más de 600, pese a que era "totalmente consciente del daño" que podía causar. Igual que a Geng Jinping por añadir el químico a la leche. Un tercer hombre, Gao Junjie, fue condenado a muerte con dos años de suspensión por fabricar el polvo tóxico en un taller clandestino. Otro, a cadena perpetua, y seis más a penas de 5 a 15 años.
La melamina es un químico industrial utilizado en la fabricación de plásticos, fertilizantes e incluso hormigón. Su alto contenido en nitrógeno permite dar lecturas de las proteínas de los alimentos más altas de lo que son en realidad.
El Gobierno mostró ayer los veredictos como prueba de su esfuerzo por garantizar la seguridad de los productos chinos. Los abogados y algunas víctimas le han acusado de dejadez, mientras otros creen que ocultó el escándalo semanas para no dañar la imagen de China durante los Juegos Olímpicos.
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