_
_
_
_
_

Los pacientes exponen en el Hospital de Santiago sus quejas

Piden unidades específicas, apoyo psicológico y más información

Una medida pionera en España permitió ayer a los jefes de servicio del Hospital de Santiago (Digestivo, Neonatología o Psiquiatría, entre otros) explicar a las asociaciones de enfermos los cambios introducidos a partir de las quejas presentadas hace un año y escuchar las demandas que aún no se han resuelto. En aquella primera reunión participaron 25 asociaciones de enfermos del área de Santiago. Ayer fueron 18 las que debatieron sobre sus necesidades con el personal del hospital.

"Es importante que ofrezcan apoyo psicológico, tanto para las afectadas como para los familiares", propone María José Ramos, presidenta de la Asociación Punto e Seguido, formada por mujeres afectadas por cáncer de mama. Ramos pide además que los médicos hagan un esfuerzo para que la información que se da "sea más comprensible".

Jesús Caramés, director gerente del Hospital de Santiago, reconoce que la mayor parte de lo que se pide en estas reuniones son demandas "lógicas y de sentido común". Una de las que se ha atendido este último año es la señalización en Urgencias, donde se han colocado líneas de colores en el suelo para llegar a las distintas áreas, una iniciativa que se extenderá a todo el complejo hospitalario.

También los celíacos han conseguido un menú sin gluten en la cafetería del hospital. Otras reformas están en camino, como puertas de cristal en los ascensores para las personas sordomudas, que no podrían comunicarse en caso de que se estropease el elevador, o botones en braille para invidentes.

Sin embargo, las asociaciones de enfermos coinciden en que queda mucho por hacer. La asociación de epilepsia Ugade lleva tiempo pidiendo la creación de una unidad específica para esta enfermedad. Su presidenta, Rita Martínez, recuerda que "enfermedades más recientes" como trastornos alimenticios, cuentan ya con una unidad propia. Y reclaman un tratamiento personalizado. "Hay enfermos que toman 16 pastillas al día y siguen teniendo crisis", apunta.

A Carmen Guillín, presidenta de la Asociación de Parkinson de Compostela, le hubiese gustado recibir más información cuando le diagnosticaron la enfermedad y por eso su entidad reclama una mayor divulgación de la dolencia. Por su parte los enfermos de Crohn solicitan más higiene en los baños y una "relación más fluida" entre médicos y pacientes. Las quejas comunes continúan siendo las listas de espera y el deficiente aparcamiento del hospital.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_