_
_
_
_
Reportaje:Escándalo en Illinois

El 'intocable' de Chicago

El fiscal Patrick J. Fitzgerald, que persigue el intento de venta del escaño de Obama, ha investigado varios casos famosos

Francisco Peregil

El fiscal Patrick J. Fitzgerald, de 47 años, llegó desde Nueva York a Chicago 10 días antes del atentado contra las Torres Gemelas. La idea era enviar allí a un fiscal que no conociese a nadie, en un Estado como Illinois, donde hasta la directora de un colegio donde alguien pretende matricular a sus hijos pregunta: "¿Usted a quién conoce, quién es su padrino?". En sólo siete años, Fitzgerald y su equipo de 300 personas, entre las cuales hay 161 abogados, han hecho un trabajo de limpieza en las calles como no se había visto desde finales de 1929, cuando el coronel Robert McCormick, propietario del periódico Chicago Tribune, pidió al director del FBI que enviase a un agente a Chicago a quien nadie pudiese comprar y J. Edgar Hoover mandó a Eliot Ness y su equipo de "intocables".

Más información
Obama niega contactos inapropiados de su equipo con Blagojevich
Obama rechaza al senador nombrado por Blagojevich para ocupar su escaño

Parecía que tarde o temprano, un fiscal como Fitzgerald tendría que llegar a Chicago, una ciudad en la que Richard J. Daley (1902- 1976), alcalde durante 21 años y padre del actual primer edil, declaró a la prensa cuando le acusaron de favorecer con una concesión pública a un hijo, hermano del actual alcalde: "Si un hombre no va a poder ayudar a su hijo, entonces... bésame el culo". Daley solía afirmar que lo que era bueno para él era bueno para la ciudad. Y demasiados políticos en Illinois parecen seguir esa máxima.

En siete años, Fitzgerald ha procesado a más de 60 funcionarios, entre los cuales se encuentra algún estrecho colaborador del alcalde demócrata Richard M. Daley, un ex policía acusado de torturar a prisioneros y grandes empresarios de la ciudad como Tony Rezko, amigo y recaudador de dinero en las campañas de Barack Obama y en las del gobernador demócrata Rod Blagojevich. Muchos de ellos se encuentran en la cárcel y otros a la espera de sentencia.

Fitzgerald está intentando ahora enviar a prisión a Blagojevich por subastar el escaño vacante de Obama en el Senado. Pero antes de eso, en 2002, ya procesó al republicano George Ryan, antecesor de Blagojevich y en prisión desde 2006, por vender licencias de conducir. Y mientras tanto, aún le dio tiempo para enfrentarse con una mano al Gobierno del presidente George Bush, y con la otra, al diario más influyente del mundo, The New York Times. Fitzgerald logró probar las filtraciones que había hecho la Casa Blanca a una periodista de The New York Times para justificar la guerra de Irak. El fiscal consiguió una condena de dos años y medio de prisión para Lewis Scooter Libby, entonces jefe de gabinete del vicepresidente, Dick Cheney, por desvelar la identidad de Valerie Plame, una agente secreta de la CIA. Pero Bush se saltó la ley y conmutó la pena a Libby.

Hijo de un inmigrante irlandés que trabajaba de portero en Manhattan, el Intocable nació en el barrio neoyorquino de Brooklin y destacó en el instituto y la universidad jugando al rugby, con su 1,88 metros de altura y 97 kilos de peso. Trabajó durante tres años para el sector privado y como fiscal empezó a hacerse un nombre en Nueva York en los juicios contra Omar Abdel Rahman, responsable en 1993 del atentado contra el World Trade Center que mató a 224 personas; contra los terroristas islamistas que atentaron en 1998 contra las Embajadas estadounidenses en Kenia y Tanzania, y contra el capo mafioso Joseph Gambino.

Aunque tiene fama de trabajador empedernido, Fitzgerald parece encontrar tiempo para mantener desde hace cuatro años un blog subtitulado Fighting for truth (Luchando por la verdad). En la página, donde abundan los comentarios de rendidas admiradoras, Fitzgerald ofrece una lista de su música preferida (Neil Young, Bruce Springsteen, los Ramones...), películas (Doce hombres sin piedad, Presunto inocente, pero no Los Intocables de Eliot Ness) y su cita predilecta: "El amor con condiciones es un oxímoron". Fitzgerald ha vivido soltero hasta este año, en que se casó con una profesora 12 años más joven.

Patrick J. Fitzgerald.
Patrick J. Fitzgerald.
Obama presenta al nuevo secretario de Energía, Steven Chu (segundo por la izquierda).
Obama presenta al nuevo secretario de Energía, Steven Chu (segundo por la izquierda).REUTERS

El nuevo Eliot Ness

- Nombre: Patrick J. Fitzgerald.

- Fecha de nacimiento: 22 de diciembre de 1960.

- Estado civil: Casado.

- Educación: Licenciado en Derecho en Harvard.

- Carrera profesional: Abogado y fiscal, en Nueva York y Chicago.

- 'Víctimas' más famosas: El ex jefe de gabinete del vicepresidente Cheney, Lewis 'Scooter' Libby, el magnate Conrad Black y los mafiosos John y Joseph Gambino.

- Lema favorito: "Piensa en global, procesa a nivel local".

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Sobre la firma

Francisco Peregil
Redactor de la sección Internacional. Comenzó en El País en 1989 y ha desempeñado coberturas en países como Venezuela, Haití, Libia, Irak y Afganistán. Ha sido corresponsal en Buenos Aires para Sudamérica y corresponsal para el Magreb. Es autor de las novelas 'Era tan bella', –mención especial del jurado del Premio Nadal en 2000– y 'Manuela'.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_