Un vertido de neumáticos amenaza A Lagoa de Antela
Los ecologistas denuncian un vertedero sumergido en el humedal
El proceso de recuperación de A Lagoa de Antela encuentra nuevos escollos. Grandes cantidades de neumáticos viejos, que la asociación ecologista Adega estima que podrían ser miles, dada la profundidad de hasta 15 metros de las antiguas areneras, se sumergen en algunos de sus humedales a escasos metros del Centro de Interpretación da Lagoa inaugurado el pasado verano. Se trata de una antigua casa labriega concebida para fomentar la educación ambiental en el espacio natural de A Limia, declarada Zona de Especial Protección de Aves (ZEPA), puesto en marcha por el Ayuntamiento de Sandiás y la Asociación Cultural Amigos da Casa da Lagoa. Tiene como objetivo el de recuperar la memoria del gran humedal de A Limia y dinamizar, además, los núcleos rurales con propuestas culturales de interés turístico.
Adega tilda de "auténtico escándalo ambiental" este vertedero incontrolado en pleno corazón de A Lagoa, un hecho que ha denunciado ya ante la Dirección Xeral de Conservación da Natureza, a la que reclama "la máxima diligencia" para que frene la agresión e identifique a los responsables del "atentado ecológico" obligándoles a retirar el vertido.
La asociación ecologista reclama además la actuación de oficio de los órganos judiciales y reprueba la pasividad del Ayuntamiento de Sandiás ya que entiende que "un vertido de tal magnitud no se forma en unos días". "Negar la evidencia, mentir o desconocer, hace que los políticos tengan también parte de responsabilidad en esta barbaridad al actuar como cómplices", señalan los portavoces de la asociación.
Sandiás fue, junto a otros ayuntamientos, impulsor en el año 2000 de la recuperación de la Lagoa. Tras ese primer intento de regeneración de la laguna propiciado por la Unesco, que fracasó al desligarse la Diputación de Ourense cuando detectó recelos entre algunos sectores de la comarca, el Gobierno consignó el año pasado 800.000 euros para un estudio de recuperación. En marzo, la Confederación Hidrográfica del Norte (CHN) presentó el estudio hidrológico ambiental de A Limia. Un texto que sentaba las bases para la recuperación de los humedales desecados artificialmente en el franquismo. La propuesta de la CHN consistía en recuperar entre 1.000 y 1.300 hectáreas de vegas y unas 60 de cursos fluviales. Incluía además la restauración de los antiguos meandros.
A la vista del vertido, los ecologistas llaman la atención sobre la fragilidad de los humedales, "los ecosistemas más débiles y los más interesantes desde el punto de vista ambiental" ya que el agua constituye "una fuente de vida primaria".
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