_
_
_
_
Reportaje:CHÁVEZ & FAMILIA

Los Chávez en su feudo

Miles de ciudadanos de Barinas, el Estado natal del presidente venezolano, quieren poner fin a los diez años en que el padre y los hermanos del primer mandatario han gobernado la región

Francisco Peregil

Hay un hombre casi desconocido en Venezuela que le ha echado un pulso al presidente Hugo Chávez allá donde Chávez tendría que ser más fuerte: Barinas, su Estado natal, la región en la que su padre, el maestro jubilado Hugo de los Reyes Chávez, de 75 años, ha gobernado desde 1998. Tan simbólico es el pulso y tanta necesidad tiene Chávez de ganarlo que ha enviado como aspirante a la gobernación a su hermano Adán, mentor ideológico de Hugo y ministro de Educación.

El Estado de Barinas no es más que uno de los 22 que hoy eligen a sus gobernadores en Venezuela. Y su capital, de igual nombre y con 300.000 vecinos, casi la mitad de los habitantes del Estado, no es más que uno de los 328 municipios en donde hoy se va a elegir alcalde. Se trata, por tanto, de una de las regiones más pequeñas y menos pobladas del país. Pero Barinas es el laboratorio político en el que la gestión de los Chávez ha podido estudiarse más de cerca, puerta a puerta, viendo cómo se invierte el dinero o cómo se dilapida, cómo se combate la corrupción o cómo se fomenta, cómo se gestiona la "revolución bolivariana" y el "socialismo del siglo XXI" que tanto pregona Hugo Chávez.

La oposición atribuye hoy a los Chávez un gran enriquecimiento, incluida la posesión de fincas de escándalo
Julio César Reyes, un político casi desconocido en Venezuela, se atreve a desafiar al chavismo en su Estado natal
Julio César Reyes: "No tengo evidencia de sus corrupciones, pero cuando el río suena, agua lleva"
Las elecciones serán una sentencia sobre la gestión de la familia del presidente en la tierra que le vio nacer
Más información
La oposición intenta arrebatar a Chávez el monopolio de la lucha por los pobres
Venezuela vota para elegir a gobernadores, alcaldes y legisladores regionales
El partido de Chávez gana en la mayoría de Estados, pero pierde los más poblados y Caracas

Barinas se encuentra en la región de los llanos venezolanos. El llanero tiene fama de ser hombre sufrido, reservado, amigo de sus amigos, orgulloso de su tierra. La región es rica en ganado, y el llanero ha aprendido a luchar contra los elementos, a crecerse en la adversidad. Hay toda una mitología en Venezuela alrededor del llanero. Las paredes de Barinas ahora están llenas de pintadas firmadas por el Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV) que dicen: "El llanero no traiciona. Estamos con Chávez". Pero una cosa es lo que se lee en los muros y otra lo que la gente dice en las aceras. El hombre que ha "traicionado" a Chávez se llama Julio César Reyes, tiene 39 años, es auditor y era hasta hoy alcalde de la ciudad de Barinas.

"No me pregunte quién va a ganar el domingo", señala Julio César Reyes. "Le conmino a que salga a la calle y hable con la gente. De cada diez, siete le van a responder que votarán por mí".

En realidad, fueron diez de diez; en distintos barrios y en diferentes momentos del día. Todos confesaban que votarían a Julio César Reyes. Nadie mencionó a Adán Chávez, ni al otro candidato opositor al oficialismo, Rafael Simón. Si algo quedó claro en la pequeña consulta hecha a pie de calle es que ningún taxista, camarero, vigilante de hotel, viandante, vendedor de prensa... nadie de entre los entrevistados habló bien de los Chávez en la ciudad de Barinas. Un transportista llegó a decir que si Chávez se presentara como presidente de nuevo, él lo votaría. "Porque gracias a él he conseguido un crédito para una vivienda. Sin burocracia ninguna. Él está haciendo mucho por los pobres". Y enseguida añadió: "Pero aquí en Barinas sus hermanos se lo están llevando todo. Se han hecho ricos a costa del pueblo". Un vecino de la ciudad dijo: "Si Argenis se hubiera lanzado como gobernador, tal vez saldría. Porque ha robado, sí, pero algo ha hecho también por el pueblo. Pero Adán Chávez tiene ya muchos años sin venir por aquí. El presidente lo lanza aquí con paracaídas y la gente no lo conocemos ni él nos conoce a nosotros".

Desde Caracas hasta Valencia, tras cuatro horas en autobús, se pueden ver carteles en los que aparece siempre Chávez vestido de rojo apoyando a sus candidatos locales, también de rojo. Desde Valencia hasta Barinas, tras otras cuatro horas en coche, los carteles se suceden. Y siempre aparece Chávez junto a algún dirigente regional. Hasta que se llega al Estado de Barinas y entonces llegan los carteles de Adán Chávez, con sus gafas y una camiseta roja igual que la de su hermano. Adán se lleva la mano derecha al corazón, con el mismo gesto que su hermano repite cada vez que se da un baño de multitud. Pero Adán sonríe en los carteles como si el anuncio estuviera diseñado para que los profesores de mercadotecnia electoral enseñaran cómo no ha de sonreír nunca un político. Adán no se prodiga nunca en entrevistas, ha rehuido los focos y los micrófonos. Y de pronto se ha visto inmerso en una campaña, obligado a saludar, a abrazar y a dar besos en un ambiente muy alejado de las aulas universitarias y de su despacho ministerial.

Su madre, Elena Frías, de 73 años, maestra jubilada, solía ser más extravertida. Repartía café entre los militantes en las primeras campañas electorales. Pero todos los consultados en este artículo convinieron en resaltar que ella y Argenis Chávez han sido quienes más acusaron su acceso a las esferas de poder. Desde que se trasladó a la residencia del gobernador, hace nueve años, empezó a lucir joyas, vestidos de grandes modistas, a someterse a varias operaciones de cirugía estética. Apenas se la ve en los restaurantes de Barinas, pero sí en los de Caracas.

La casa donde vivían hace diez años es una vivienda de protección social. Los vecinos rehúsan hablar sobre los Chávez. Si a alguno se le pregunta quién cree que ganará hoy, opina que será Julio César Reyes, quien ha cambiado la camiseta roja del chavismo por una azul y ha fundado el partido Gente Emergente. El candidato por esa formación a la alcaldía en la ciudad de Barinas, Wilmer Azuaje, de 32 años, ha difundido en prensa varias fotos sobre las fincas y las casas que han comprado los Chávez desde que han llegado al poder. "Tienen nueve mansiones en Barinas a su nombre, reconocidas por ellos. Y después han comprado fincas, donde han construido hasta pistas de baloncesto. A mí me odian los Chávez por difundir esto, pero el odio es recíproco".

Wilmer Azuaje asegura que los Chávez son los mayores latifundistas y capitalistas de Barinas. Sostiene que el maestro Chávez poseía en Camirí, un pueblo a media hora en automóvil desde Barinas, una finquita, La Chavera, que antes de ser gobernador medía 30 hectáreas. "Y ahora la finquita mide 600 hectáreas" [el equivalente a 600 campos de fútbol]. Poco más allá, cerca del río Isla de la Fantasía, otro miembro de la familia Chávez tiene La Martinera, una finca de 300 hectáreas con cancha de baloncesto. Nacho también tiene otra en Santa Lucía de 700 hectáreas. Un sobrino de Chávez posee otra finca de escándalo. Pero la más grande de todas es la de Argenis, La Malagueña, que consta a nombre de Néstor Izarra, un antiguo empleado de la familia. Y mide nada más y nada menos que 2.000 hectáreas. Esa finca, a partir de hoy, igual pasa a ser del pueblo.

El maestro Chávez suele ser discreto. Pero ante los anuncios difundidos por Azuaje sobre "las mansiones" de los Chávez, el padre del presidente venezolano publicó un anuncio en la prensa local el pasado 14 de noviembre en que decía: "Esas fotos que aparecieron tomadas por Wilmer Azuaje y Julio César Reyes son las casas de nuestras familias y de nuestros hijos, y en donde hay niños, hay niñas y por supuesto una familia, pues eso forma parte de esa maldad, de esa traición que estos ciudadanos han venido aplicando en Barinas en contra de la familia Chávez. Por eso, lo repito nuevamente con todo el sentimiento de mi alma, ellos no se van a quedar riendo de estas traiciones, de esta maldad y de este hecho, pues atenta contra una familia que lo que ha hecho es trabajar por Barinas".

"Incurables farsantes de la política, los tránsfugas, los traidores, no habrá maromas ni mentiras que les funcionen, nadie mejor que el pueblo para conocer la verdad porque en Barinas el pueblo es la verdad... Barinas tierra de integridad, de dignidad... Barinas tierra donde jamás se renuncia al honor: tarde o temprano pagarán sus culpas, pagarán sus traiciones y pagarán las ofensas que le han hecho a mi familia".

La gente suele exculpar "al maestro", al padre de Chávez, gobernador de Barinas hasta hoy. "En realidad, el viejo es una persona de carácter débil y bondadoso que primero estuvo dominado por su esposa y después por sus hijos. Aquí, el que ha ejercido de gobernador de hecho ha sido el hermano del presidente, Argenis Chávez", explica el candidato a la gobernación de Barinas por el partido opositor Un Nuevo Tiempo, Rafael Simón. "Argenis ha sido el mayor corrupto", afirma.

Sus propios hermanos llaman a Argenis Zamurito, que es el nombre de un buitre que despliega sus alas sobre la presa para no dejar que nadie más toque lo que él ya ha cogido. Rafael Simón cree que el sobrenombre se debe sólo a que Argenis es de piel más bien oscura. Pero otras personas relacionadas con su campaña aseguran que el mote se lo pusieron sus propios hermanos sólo después de que empezara a ejercer como gobernador en la sombra de Barinas. "Su grado de corrupción era tan grande que Hugo Chávez veía que estaba poniendo en peligro su dominio aquí", indica Simón. "Una vez vino Chávez a Barinas y le destrozó a Argenis un todoterreno de lujo de la marca Hummer. Argenis tenía todo listo para postularse como gobernador. Tenía sus cuadros de campaña. Pero Hugo Chávez no lo dejó. Y envió aquí a Adán Chávez, que viene obligado. Yo lo conocí en el bachillerato, lo conozco desde carajitos. Era y es muy introvertido, sin facilidad de expresión. Aquí fue profesor en la Universidad Ezequiel Zamora. Pero durante 12 años no presentó un solo trabajo ni una sola investigación".

El disidente chavista Wilmer Azuaje asegura que las "amenazas del maestro" no servirán de nada porque el pueblo se ha dado cuenta de que Chávez "enfermó con el poder". Para demostrar hasta qué punto Barinas le apoya a él y no al candidato chavista para la alcaldía, Abundio Sánchez, muestra un mitin reciente de Chávez en la ciudad. Azuaje se subió a un edificio alto y cuando Chávez declamaba que la asistencia de tanta gente "roja, rojita" probaba hasta qué punto Barinas estaba con sus candidatos, Azuaje rodó las calvas, los espacios sin gente entre la multitud de camisetas rojas. "Y ahí los maté, eso no me lo perdonan". Después muestra Azuaje otra manifestación de su reciente partido, Gente Emergente, con cientos de seguidores vestidos con camisetas azules.

Chávez ha pedido a su candidato que cuando gane las elecciones limpie "de ratas la sede de la alcaldía". Y Azuaje se ríe. En la sede electoral de su partido hay gente que ha trabajado en Caracas en varios ministerios. Y creen que Venezuela está cambiando, que está emergiendo un nuevo elector de izquierdas que no votará a ciegas por Chávez. Sin embargo, las mismas fuentes reconocen que la maquinaria electoral del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV) es con diferencia la mejor del país.

Adán Chávez, con quien este periódico ha intentado contactar en más de veinte ocasiones, ha prometido en su campaña hacia la gobernación construir una refinería, un aeropuerto internacional, una planta de fertilizantes y un barrio de casas prefabricadas. Pero la gente lo que quiere sobre todo es seguridad. Ése es sin duda el mayor problema de la región. La mayor parte de los bancos han sido asaltados hasta con bombas lacrimógenas, el secuestro de personas y de automóviles por los que piden rescate es diario; las muertes por atraco, también. "Y en medio de esa inseguridad", explica el candidato Julio César, "la gente ve entrar en los bares a los hermanos y a los hijos de los hermanos de Chávez con sus escoltas, y sus carros, saltándose los semáforos. Yo salgo sin escoltas. Pero a mí me llama el presidente traidor y disidente de la revolución. Y me gustaría que se inventara una especie de revolucionómetro, para que se pudiera medir esa actitud. Ellos han hecho aquí una campaña que dista mucho de llamarse revolucionaria. Con camiones y camiones llenos de aparatos eléctricos para regalar a la gente, como si se pudiera comprar la conciencia del pueblo. El revolucionario no es el que se puede vestir con una franela

roja, sino el que cada día es más humilde. Aquí debería investigarse cómo alguna gente se ha enriquecido. Si hay algo que no se puede ocultar es la tos y la riqueza".

Todos los hermanos de Chávez están bien situados. Nacho es coordinador regional de programas conjuntos cubano-venezolanos; Aníbal es alcalde de Sabaneta, pueblo donde se crió el presidente y aspira a ser reelegido; Adelis, economista y vicepresidente del Banco Sofitasa.

Pero el gobernador en la sombra ha sido hasta hoy Argenis.

Y uno de los ejemplos más gráficos de su gestión en Barinas, según la oposición, es un estadio de fútbol. "Cuando se organizó en agosto la Copa de América, en algunas ciudades se construyeron estadios de fútbol nuevos. Aquí se decidió reconstruir el viejo, que tenía más de 50 años", recuerda el opositor Rafael Simón. "Sólo se jugó un partido, el de Paraguay contra Venezuela. Tuvimos que dejar los carros a unas diez manzanas del estadio. Las obras costaron más que las de un estadio nuevo. Y lo peor es que aún siguen de obras". En efecto, esta semana continuaban las obras del estadio.

"¿Cómo puede el presidente llamar corrupto a nadie cuando tiene aquí a sus hermanos, que son los mayores corruptos?", pregunta el vigilante de seguridad Iván Márquez. "Mientras su familia se ha enriquecido, aquí hay cada semana al menos tres cortes de luz; el hospital que iban a remodelar nunca terminaron de hacerlo; la cárcel sigue en la ciudad, no han construido una nueva, y todos los días se monta el pedo allí; el nuevo terminal de autobús lleva un año y medio parado... Y mientras, tenemos que ver cómo los hijos de los hermanos de Chávez se quedan en la discoteca Cooper's Town o en la Escape y pagan cuentas de miles de bolívares que casi nadie en este pueblo puede permitirse".

Hay gente que en Barinas se pregunta: ¿por qué tardaron Julio César Reyes y Wilmer Azuaje tanto tiempo en denunciar las supuestas "ineficacia", "corruptelas" y "prepotencia" que ahora denuncian en los Chávez? "En realidad tuvimos siete años de peleas hasta que nos expulsaron en enero de 2008", comenta Wilmer Azuaje. "Yo no trabajé codo con codo con ellos. No tengo evidencia sobre sus corrupciones", justifica Julio César Reyes. "Pero aquí decimos que cuando el río suena, agua lleva".

"Los hermanos siempre me vieron como a un competidor", añade César. "Y proyectos que yo presentaba para mejorar la ciudad se quedaban en la cuneta. La ruptura vino cuando hubo que hacer elecciones internas en el partido para ver quién se presentaba a gobernador y Hugo y Adán me dijeron que yo tenía que presentarme y retirarme a los tres días. Me dijeron que Argenis Chávez y yo habíamos dividido esto. Pero eso era inadmisible. Porque yo en el primer mandato salí de alcalde con el 57% de los votos, y en el segundo, con el 91%, lo que significa que fueron 20.000 votos más en términos absolutos que el maestro Chávez", concluye César.

La ciudad de Barinas no es un sitio que nadie visitaría por razones turísticas. Muchas de sus calles están mal asfaltadas y caminar por ellas es exponerse a ser asaltado. Pero su gente no parece resignada. Los comicios de hoy serán una sentencia sobre la gestión de los Chávez en la tierra que los vio nacer y los aupó al poder.

Julio César Reyes, en una imagen del 15 de noviembre, en plena campaña para arrebatarle la goberanción de Barinas a los Chávez.
Julio César Reyes, en una imagen del 15 de noviembre, en plena campaña para arrebatarle la goberanción de Barinas a los Chávez.
Hugo Chávez (derecha) con su hermano Adán, candidato a suceder al padre de ambos como gobernador del Estado venezolano de Barinas.
Hugo Chávez (derecha) con su hermano Adán, candidato a suceder al padre de ambos como gobernador del Estado venezolano de Barinas.AFP

La familia Chávez

- Padre: Hugo de los Reyes Chávez, maestro jubilado; gobernador de Barinas desde 1998.

- Madre: Elena Frías, maestra jubilada; encabeza una organización caritativa para menores en Barinas.

- Hermanos:

- Adán Chávez, candidato del partido en el Gobierno para suceder a su padre, Hugo de los Reyes, como gobernador de Barinas.

- Hugo, presidente de Venezuela.

- Narciso, coordinador regional de programas cubano-venezolanos.

- Aníbal, alcalde de Sabaneta, donde se crió el presidente; aspira a la reelección.

- Argenis, secretario de Estado de Barinas en el Gobierno de su padre..

- Adelis, economista, vicepresidente del Banco Sofitasa. Colaboraen eventos deportivos

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Sobre la firma

Francisco Peregil
Redactor de la sección Internacional. Comenzó en El País en 1989 y ha desempeñado coberturas en países como Venezuela, Haití, Libia, Irak y Afganistán. Ha sido corresponsal en Buenos Aires para Sudamérica y corresponsal para el Magreb. Es autor de las novelas 'Era tan bella', –mención especial del jurado del Premio Nadal en 2000– y 'Manuela'.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_