_
_
_
_
Reportaje:

El camino hacia la excelencia

Euskalit intenta desde hace 15 años que empresas y entidades ofrezcan los mejores productos y servicios

Calidad y excelencia. Cada vez más empresas, centros educativos, sanitarios o asociaciones se vanaglorian de estos reconocimientos. ¿Pero qué son realmente? Explicarlo requiere su tiempo, según admite Mikel Ugalde, director de la fundación Euskalit, que se dedica a esta labor desde hace 15 años.

La calidad es ofrecer lo que el cliente espera, de manera reiterada y conseguir la plena confianza de éste. "Se trata de dedicar más tiempo al cliente y sus necesidades. Si eres un carnicero y te piden 100 gramos de jamón, que sea eso y no 150 gramos, y con la calidad que se demande. Si es una empresa industrial, debe diseñar los productos según las necesidades del usuario: en automoción, si los coches son para jóvenes, deben ser baratos y que consuman poco".

El 24% de las empresas de más de cinco empleados tiene algún certificado

Pero la calidad no se queda ahí. También debe extenderse al proceso de fabricación del producto, que "todo esté bien organizado". "Se trata de decidir cuáles son los materiales adecuados, los proveedores...", agrega Ugalde. Evidentemente, trasladar la idea de la calidad es más sencillo de hacer en el caso del carnicero, que desde hace décadas siempre ha buscado ese trato directo con el cliente y adaptarse a sus peticiones. Los problemas son mayores en las grandes empresas y es ahí donde trata de incidir Euskalit. "Buscamos que el proceso de fabricación se haga metódicamente. Se trata de estandarizar el producto final y, para eso, previamente hay que estandarizar el proceso de fabricación", explica el director de la Fundación Vasca para la Excelencia. Actualmente, 4.700 de las más de 20.000 empresas de más de cinco empleados existentes en Euskadi cuentan con algún certificado de calidad.

¿Y la excelencia? "Es hacerlo de manera sobresaliente", dice Ugalde. En este caso, además de la calidad, se exige innovación, tanto para sorprender a los clientes y atraer a otros nuevos como para desarrollar productos singulares. La excelencia se completa con la llamada responsabilidad social. "Es decir, no abusar de nadie". "Es razonable y lógico que las empresas se lleven sus beneficios, pero también que haya sueldos justos, los trabajadores tengan una formación y se les delegue responsabilidades. Y todo esto cuidando el entorno en el que estás, el medio ambiente".

Para el reconocimiento de la excelencia, Euskalit tiene tres tipos de distinciones. El diploma del compromiso de la excelencia - "para los que apuntan buenas maneras"- lo han recibido más de 150 compañías. La Q de plata la han logrado 138 organizaciones y es más exigente, ya que se concede a través de visitas y análisis de las empresas, centros educativos u organizaciones a través de llamado club de evaluadores, del que forman parte 1.600 personas. Y finalmente está la Q de oro, con la que cuentan 29 entidades.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
SIGUE LEYENDO

Frente a las más de 20.000 empresas vascas de más de cinco trabajadores, estas 317 entidades suponen un pequeño porcentaje. "Pero es que hablar de excelencia es como hablar de la santidad", dice jocosamente Patxi Pardo, responsable de comunicación de la fundación.

El reto de Euskalit es continuar con esta labor de concienciación sobre la importancia de la calidad y la excelencia, tanto en firmas industriales como en organizaciones sin ánimo de lucro. Uno de sus celebraciones principales es la Semana Europea de la Calidad y la Excelencia, que comenzó el lunes y ha cumplido su 14ª edición. Se han organizado hasta 49 actos en distintas localidades, que abarcarán a diferentes sectores, desde la tecnología o la industria, hasta el deporte o las ONG. La gran cantidad de eventos ha obligado a prolongarla durante una quincena, hasta el 28 de noviembre. Cada comunidad autónoma organiza un acto similar en estas fechas y en Europa hay más de un centenar de jornadas.

"Nuestra idea es sembrar mucho en la base, organizando gran cantidad de cursos y jornadas como la Semana Europea", apunta Ugalde. El objetivo final es que cada año cerca de 80 organizaciones nuevas se sumen a alguno de los tres reconocimientos de la excelencia.

Fundación privada

Euskalit es una fundación privada, con 23 entidades en su patronato, que funciona desde 1993. Su objetivo es concienciar para que empresas y organizaciones aporten más calidad en su trabajo diario pero también busca una mayor justicia social: salarios dignos, formación continua y delegación de responsabilidades en los empleados. Se financia con contratos de colaboración con el Gobierno y cuotas de 700 empresas asociadas.

Suscríbete para seguir leyendo

Lee sin límites
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_