Google pagará a los autores por los libros digitalizados
Un pacto con creadores y editores da vía libre a que obras descatalogadas sean distribuidas y vendidas por Internet - De momento es válido en EE UU
Un acuerdo de 125 millones de dólares (98 millones de euros) entre Google, los autores y la industria editora permitirá, si la justicia le da el visto bueno final, que millones de libros descatalogados sean digitalizados, distribuidos y comercializados por Internet con el permiso de los titulares de los derechos de autor en Estados Unidos. Además, convierte al buscador en un nuevo y potente librero en competencia directa con Amazon.com. De momento, el pacto sólo es aplicable en Estados Unidos.
"Este acuerdo da nuevo vida a millones de libros sin poner en peligro el copyright", aseguró Richard Sarnoff, presidente de la Asociación de Editores de EE UU.
Tras dos años de largas negociaciones, este pacto a tres bandas permitirá a ciudadanos, investigadores e instituciones comprar libros descatalogados en Internet a través de Google, que pagará sus correspondientes derechos de autor, a la vez que millones de estadounidenses tendrán acceso libre a la lectura de una versión completa de estas obras a través de las bibliotecas y universidades que participan en el programa de digitalización de libros de Google.
Aquellos títulos que todavía están a la venta sólo estarán disponibles en versión electrónica completa así como para su compra a través de Google si sus autores lo autorizan expresamente.
Hasta ahora, Google ofrecía fragmentos de las obras protegidas.
El acuerdo resuelve dos demandas por violación del copyright interpuestas por la Authors Guild, el gremio que defiende los derechos legales de los autores, hace más de tres años, y por la Asociación de Editores de Estados Unidos en nombre de las cinco grandes editoras del país.
Control de derechos
El pago de los 125 millones de euros cubre las reclamaciones por los siete millones de libros que
Google ya ha digitalizado en su programa de Búsqueda de Libros, en el que participan varias de las bibliotecas y universidades más prestigiosas del país.
Además, servirá para finnanciar y establecer un nuevo Registro de Libros que permitirá a los titulares de derechos hacer constar su lista de obras protegidas y, cuando éstas sean utilizadas en Internet, recibir la remuneración económica que les corresponda. Es decir que el pacto reconoce los intereses de los titulares de derechos, les proporciona medios efectivos para que puedan controlar la difusión en Internet de sus obras y les permite recibir compensación por ello.
El registro, independiente, sin ánimo de lucro y de nueva creación, estará formado al 50% por representantes de los autores y los editores. El precio del libro será fijado por los editores o por un algoritmo específico diseñado por Google, según cada caso concreto. La fórmula de reparto establece que autores y editores se queden con el 63% de los ingresos y el buscador con el 37% restante.
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