Sobre las ayudas a Cuba

El ministro Moratinos ha anunciado que España ayudará al pueblo cubano a superar la "crisis de los huracanes", podrán así recuperar viviendas o servicios básicos ahora arrasados por los vientos y las lluvias, tal vez incluso las dejen en mejor estado que antes del desastre, lo cual no es muy difícil conociendo el estado real de las casas e infraestructuras de la isla.

Es posible que los 400 millones de euros sirvan para aliviar la grave situación que viven los ciudadanos cubanos, aunque sospecho que sólo servirán para que sus dirigentes sigan sosteniendo una sociedad "justa, incluyente y cada vez más democrática y abierta", según su canciller Pérez Roque.

Lo que sí sé con certeza es que nada de esta ayuda llegará a las familias de los más de 50 presos políticos que aún quedan en las cárceles del régimen, aunque éste les niegue esa condición de ser presos por "pensar distinto", afirmando que han sido juzgados por traición a la patria; lo mismo decían Batista, Stalin o Franco, por recordar algunos ejemplos, de muchos de sus represaliados.

Lo único cierto es que estos presos irán saliendo a cuentagotas, porque son una de las monedas de cambio más valiosas que hoy día tienen los dirigentes castristas para conseguir ayudas económicas de otros países.

La otra son las promesas de cambio gradual del régimen político y económico de la isla, que hasta ahora sólo se han traducido en permitir a los ciudadanos alojarse en hoteles y comprar móviles y ciclomotores, dos derechos conseguidos por el pueblo cubano tras 50 años de revolución. Eso sí es un avance social y no la ley de igualdad o el matrimonio entre personas del mismo sexo.

Espero, al menos, que el Gobierno español con sus "gestiones discretas" consiga que Cuba supere pronto la "crisis de los Castro", para que de una vez para siempre la democracia, la libertad y los derechos humanos arrasen al régimen como han hecho el Ike y el Gustav con la isla.

Entonces sí que podremos afirmar que España ha ayudado a todo el pueblo cubano, incluso a los inexistentes presos políticos y sus familias.