Un hombre mata a su compañera a puñaladas y la descuartiza
Otra inquilina del piso convenció al homicida para que se entregara a la policía
La Policía Local de Jerez impidió ayer que un hombre huyera llevando en su equipaje los restos del cadáver descuartizado de su compañera, a quien supuestamente había acuchillado. La mujer tenía 36 años y convivía con el hombre y otros seis compatriotas, todos de nacionalidad china, en un piso de la barriada jerezana de Los Pinos.
El presunto homicida llegó a descuartizar parte del cadáver con el objetivo de esconderlo en una maleta. Según los vecinos, la víctima estaba embarazada de unos seis meses, pero la autopsia lo descartó ayer. El supuesto autor del crimen, también chino y de 35 años, permanece detenido en la comisaría de la ciudad.
Pasada la medianoche, la Policía Local de Jerez recibía el primer aviso que alertaba sobre la muerte de una mujer. Cuando los agentes llegaron al lugar de los hechos, hallaron el cuerpo ya sin vida y parcialmente descuartizado de la víctima, que presentaba un brazo amputado.
El presunto homicida no ofreció resistencia, extendió las manos para que le pusieran las esposas y en un escueto español confesó la autoría de la muerte de su pareja. Según fuentes de la investigación, desistió después de que una de sus compañeras de piso, que hacía de intérprete ante la policía, le convenciera para que se entregara y diera carpetazo a su macabro plan.
La pareja vivía de alquiler desde hacía dos años en el edificio situado frente a la universidad. Compartían una vivienda de tres dormitorios con otros seis inquilinos, todos ellos compatriotas suyos.
En la madrugada de ayer, el resto de los habitantes del bloque había escuchado "los mismos ruidos de siempre". "Las discusiones y los gritos eran diarios. De hecho, la casera ya les había llamado la atención en varias ocasiones. Había rachas mejores y otras peores", relataba una de las vecinas que prefirió mantenerse en el anonimato. "Anoche la policía llamó a todos los pisos por el telefonillo por si habíamos escuchado algo, pero la verdad es que no había nada fuera de lo normal", añadió.
Ayer los vecinos enmudecieron. Pocos querían dar detalles de unos inquilinos con los que que "se relacionaban muy poco". "Entraban y salían continuamente", apuntaba otra de las ocupantes del bloque.
El piso en el que murió la víctima estaba vacío en la mañana de ayer, pero en las escaleras seguían los rastros de sangre. El presunto homicida permanecía en la comisaría de Jerez. Los seis compañeros de piso de la pareja declararon ante la magistrada que lleva el caso, quien ha ordenado secreto sumarial.
El Ayuntamiento de Jerez ha decretado tres días de luto oficial y anunció que se personará como acusación popular en el proceso judicial. Desde el Consistorio convocaron una concentración de repulsa a las puertas del concejo que se celebrará hoy a las 13.00.
La mayoría de los ocho inmigrantes que residía en el lugar del asesinato, incluida la víctima, trabajaba en un restaurante chino de la ciudad. Algunos de ellos, como es el caso del detenido, no tenía residencia legal en España. Sobre él no pesaba orden de alejamiento alguna. De hecho, la delegación municipal de Igualdad y Salud no tiene constancia de que la víctima hubiera presentado denuncias por malos tratos en el Centro Asesor de la Mujer.
31 extranjeras
- En lo que va de año, han sido asesinadas por sus parejas o ex parejas 63 mujeres -incluida la china de ayer-, según el recuento que lleva este periódico, que incluye siete casos que están todavía investigándose.
- Treinta y una de ellas (aproximadamente la mitad) eran extranjeras.
- En sólo ocho de los casos (el 13% del total) el agresor tenía orden de alejamiento de la víctima. No es el caso de la china apuñalada ayer, que no había denunciado malos tratos.
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