Las diputaciones dejarán de recaudar 732 millones por el impacto de la crisis

Euskadi se encuentra estancada. El Consejo Vasco de Finanzas, el organismo que reúne al Gobierno y las tres diputaciones para fijar la recaudación fiscal y su reparto, asumió ayer que van a dejar de recaudar este año casi 732 millones de euros, un 5,12% menos de la previsión inicial que manejaban. Hace ahora un año, el Consejo fijó la recaudación prevista para 2008 en 14.282,4 millones. Con esta cifra se elaboraron los presupuestos en vigor de las tres diputaciones, el Ejecutivo y los ayuntamientos, que participan de la tarta a través de la financiación foral. Un año después, la crisis ha reducido esa previsión en 731,7 millones de euros. Con esta cifra se podría pagar todo el presupuesto del año entrante de la ciudad de Bilbao y casi la mitad del de Vitoria, o costear más de la mitad de la Supersur, el proyecto de carreteras más caro en la historia de Euskadi; o sufragar todos los trabajos de este año en el tramo vasco de la Y ferroviaria (y sobrarían 200 millones); o pagar casi todas las ayudas de los años 2008 y 2009 a la exclusión social, o abonar con creces el coste de toda la modernización hospitalaria prevista hasta 2012.

Zenarruzabeitia descarta cambios en los principales impuestos

No es ninguna novedad que la crisis sacude a Euskadi. La vicelehendakari, Idoia Zenarruzabeitia, rebajaba anteayer la previsión de crecimiento del PIB al 2,3% este año, muy por debajo del 3,6% inicial. Más allá del resultado, la previsión de recaudación resulta fundamental al afrontar el gasto público. Los datos que aportó Zenarruzabeitia en su comparecencia tras la reunión con los tres diputados generales (Xabier Agirre, de Álava; Markel Olano, de Guipúzcoa, y José Luis Bilbao, de Vizcaya) detallan además que el cierre de recaudación de este año no sólo cae sobre lo previsto, sino que será un 1,6% inferior al de 2007.

La previsión para el año entrante también resulta mala, sólo un 0,3% superior a la de este ejercicio. Para 2009, las diputaciones sólo prevén recaudar 40 millones más que este año. Zenarruzabeitia reiteró que sus cálculos son prudentes, aunque las cuentas de la mayoría de administraciones e instituciones internacionales están siendo sistemáticamente corregidas por la crisis. Uno de los asistentes a la reunión de ayer reconocía después que es imposible saber qué sucederá en 2009. Mantener el gasto público probablemente exigirá déficit o endeudamiento de las distintas administraciones.

El panorama en los tres territorios es muy similar. La recaudación cae básicamente por el descenso del Impuesto de Sociedades en un 15%. En Vizcaya, un tercio de esa caída corresponde a un solo contribuyente. El IRPF crece ligeramente (un 5,7%), mientras que el IVA de recaudación propia se mantiene estable, aunque el conjunto de la imposición indirecta baja un 0,25%.

Pese a la voluntad que ayer repitió Olano en Radio Euskadi de hacer extensivas las reformas fiscales pactadas en Guipúzcoa a toda Euskadi, Zenarruzabeitia recalcó que no se prevén cambios en los principales impuestos (IRPF, IVA y Sociedades) y sólo se prevé la desaparición del Impuesto de Patrimonio.

El presidente de Eudel, Jokin Bildarratz, acudió por primera vez al Consejo en representación de los ayuntamientos como oyente.